El exponencial desarrollo de los sistemas multimedia y de infoentretenimiento que equipan los vehículos ofrecen una oportunidad única de llegar a potenciales clientes. Las marcas lo saben y algunas, como BMW, ya han empezado a estudiar la forma de sacar ventaja de esta posibilidad.
Del modo en que ya funcionan algunas aplicaciones móviles en los smartphones, la marca de Múnich estudia cómo insertar publicidad en el marco de la interfaz del sistema multimedia ConnectedDrive que integran en el habitáculos sus vehículos. A través de un proyecto que ha bautizado como "Mercado virtual del futuro", BMW analiza las opciones de cómo ofrecer un servicio de valor añadido a sus clientes sin que éstos se vean agredidos.
"En nuestra visión para el mercado virtual del futuro, el vehículo proporcionará a los clientes información y ofertas relevantes en función del contexto, las preferencias y la ruta que se esté siguiendo" explicó Jörg Preißinger, director de Proyectos de BMW Group Investigación y Tecnología.
Esta visión no es nueva, pues ya otros fabricantes como General Motors han especulado con potenciar este tipo de información dirigida al conductor. Pero BMW es la que, de momento, parece más decidida a materializarla en sus automóviles. Como primer paso, la empresa de Múnich firmaba en la primavera de 2012 un proyecto conjunto con el fabricante alemán de software SAP, que ha desarrollado la solución de mercado virtual basándose en la nube para obtener información y servicios de este mercado para el cliente.
En su primer prototipo, una aplicación implementada en un Serie 7 de investigación permite a los conductores fijar sus propias preferencias personales para el filtrado personalizado de ofertas y servicios. Además, de forma paralela, los datos recabados por el vehículo en tiempo real son procesados para predecir las necesidades de los conductores durante el transcurso del viaje.
Por ejemplo, cuando el vehículo se acerca al destino marcado en el navegador, se genera una solicitud de información sobre la situación de estacionamientos en tiempo real, incluyendo datos sobre disponibilidad y tarifas; así, la aplicación muestra las recomendaciones personalizadas de acuerdo también con los datos de la geolocalización.
Desde BMW aseguran que este proyecto de investigación abre el camino para un mayor nivel de confort para el conductor, dado que el resultado final podría permitir futuros sistemas de navegación que no sólo proporcionen información sobre la ruta más rápida, sino también recomendaciones sobre ofertas especiales de café en estaciones de servicio, por ejemplo.
Pero, al final, sobre todo ello planea la sombra de que los conductores se vean amenazados por la invasión publicitaria en un entorno tan privado como es su propio vehículo. Por ello, BMW seguirá investigando las formas en que poder proyectar ese mercado virtual que parece ser el futuro sin que sus clientes lo rechacen de plano.
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BMW Vision ConnectedDrive
