El preparador norteamericano East Coast Defender puso todo know-how en un Land Rover Defender para convertirlo en un plausible competidor del Mercedes-Benz Clase G.
Para hacer más interesante el trabajo realizado en este llamativo SUV denominado Project Viper Defender, el tuner con sede en Kissimmee (Florida) limitó la personalización a 10 unidades, así que la exclusividad, además del alto desempeño, son sus principales atributos.
Debido a que el motor original del Land Rover Defender queda a debe en potencia, los creadores de este proyecto decidieron ir más lejos y le montaron un ocho cilindros con el sello de Chevrolet, específicamente se trata del LS3 V8 de 6.2 litros.
Ya sea el modo que se elija en el sistema de tracción 4x4, el bloque envía 430 Hp a las ruedas traseras, o bien a ambos ejes por medio de una transmisión automática de seis velocidades.
Este alto poder es acompañado por una transformación de la carrocería estilo pick-up, con unas llantas de 20 pulgadas cubiertas con neumáticos todoterreno Mud Grappler Nitto, una suspensión off-road y una jaula de seguridad externa. Lo anterior es complementado por una serie de luces de LED, un cabestrante, protectores en los grupos ópticos, parte baja y costados de la carrocería.
Al interior, este Land Rover Defender de East Coast Defender también es sumamente atractivo. Destacan los asientos forrados de cuero, la pantalla táctil, el sistema de navegación, la cámara de reversa y la iluminación ambiental.
Si se tiene el deseo de ser dueño de unas de las 10 unidades del Project Viper Defender hay que tener en cuenta el precio unitario de US$ 285.000 dólares.