El Toyota Gazoo Racing se enfrenta este fin de semana a su gran objetivo: ganar las 24 Horas de Le Mans. Poco importarán las victorias en Silverstone y Spa-Francorchamps, primeras citas del WEC en este 2017, si no consiguen el triunfo en la 85ª edición de la prueba a disputarse en el circuito de La Sarthe.
Desde su debut en 1985, Toyota acumula 18 participaciones, en las que finalizó en cinco oportunidades en el 2° lugar. La última, ocurrida el año pasado, fue quizás la más dolorosa: el auto de la tripulación conformada por Sébastien Buemi, Anthony Davidson y Kazuki Nakajima se quedó tirado a falta de un giro para finalizar la carrera cuando iban en punta con una distancia tranquilizadora respecto del segundo (ver las razones aquí).
Toyota participó 18 veces, y en 5 finalizó en el 2° lugar
Aquel mal trago incitó a los directivos de la firma japonesa a aumentar su compromiso con la búsqueda del triunfo para la actual edición. Tal es así que han incorporado un tercer coche, por lo que tendrán ventaja numérica con respecto a sus más acérrimos rivales y vencedores en Le Mans los últimos dos años: Porsche.
Además, y a diferencia del año pasado, el Toyota TS050 Hybrid se mostró imbatible en el inicio del presente certamen, con dos triunfos sobre misma cantidad de carreras disputadas, de la mano del trinomio de Buemi, Davidson y Nakajima en ambas ocasiones.
¿La causa del avance con respecto a 2016? Un nuevo motor de 2.4 litros V6 con turbo y con una eficiencia térmica mayor, junto con un nuevo sistema híbrido mejorado (unidades generadoras más pequeñas y ligeras).
Para las 24 Horas, Toyota contará con Buemi, Davidson y Nakajima en el TS050 Hybrid n°7, Conway, Kobayashi y Sarrazin en el n°8 y José María López, Nicolas Lapierre y Yuji Kunimoto en el n°9. Los tres autos utilizarán el paquete de carga aerodinámica baja, pensando en las largas rectas presentes en el escenario semipermanente.