Hace justo un año se presentó en sociedad el MG ZS. Fue en el Salón de Guangzhou de principios de 2017 donde la marca perteneciente al conglomerado SAIC estrenó su nuevo SUV compacto, el que se instala por debajo del GS en busca de un cliente más joven (puedes leer nuestra prueba de manejo del GS en este link).
El ZS aterriza ahora en Chile en cuatro versiones, dos con caja mecánica y otras dos con caja automática, aunque estas últimas no han llegado formalmente al país.
Nuevamente la fortaleza de la marca es su diseño y, por supuesto, la relación precio/equipamiento, ya que el MG ZS parte en $8.490.000 y escala hasta los $9.790.000, aunque ambas versiones cuentan con un bono de financiamiento de $500.000.
Diseño moderno
El ZS luce el nuevo estilo de diseño de la marca, que rompe con lo que habíamos visto tanto en el GT como el GS. Se estrena una nueva parrilla de gran visibilidad, largas nervaduras laterales, grupos ópticos denominados London Eye (como la rueda ubicada en la capital británica) que incluyen luces diurnas LED y neblineros, y un parachoques robusto.
La silueta es proporcionada y se distingue claramente su orientación juvenil, al ofrecer llantas bicolor de 16 y 17 pulgadas, rieles en el techo.
En el habitáculo destaca la triple oferta de tapiz, tela, cuero oscuro y cuero café, mientras que la marca detalla que el 80% de los materiales son blandos al tacto.
El MG ZS mide 4.314 mm de largo, 1.809 mm de ancho, 1.648 mm de alto y tiene entre ejes 2.585 mm, compitiendo por tamaño y posicionamiento con el Chery Tiggo 3, el JAC S3, el Ford Ecosport y la Chevrolet Tracker, por nombrar a unos pocos.
Bajo el capó se ofrece con un motor de cuatro cilindros y 1.5 litros aspirado, que eroga 114 caballos de fuerza y 150 Nm de par, asociado, por ahora, a la caja mecánica de cinco velocidades.
MG indica que este auto ha superado con cinco estrellas las principales pruebas de choque a la que ha sido sometido. Destaca de serie el doble airbag frontal, frenos ABS con EBD, el control de estabilidad Bosch y los anclajes isofix. La versión Comfort añade sensores traseros con cámara de retroceso.
En cuanto a equipamiento, la variante de entrada Standard ofrece vidrios y espejos eléctricos, cierre centralizado, aire acondicionado y un sistema de audio Smart con bluetooth y lector de MP3.
La variante Comfort añade climatizador, volante multifunción, control crucero y el sistema de infoentretenimiento Inkalink, con pantalla táctil de 8”, conectividad a Apple CarPlay y Android Auto y dos puertos USB.
La marca pretende vender unas 300 unidades mensuales.
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