A finales de 2017, el rumor del cese de producción del Beetle comenzó a expandirse, pero es ahora, justo en el marco del Salón de Ginebra 2018 donde esta noticia se confirma por el mismísimo Frank Welsch jefe de I+D de Volkswagen.
Es así que el Volkswagen Beetle seguirá el mismo camino que el Scirocco y al igual que este deportivo, no tendrá un sucesor directo cuando culmine su actual ciclo de vida. De hecho, todo indica que su lugar como automóvil “retrofuturista” sería ocupado por la versión definitiva del conceptual eléctrico I.D. Buzz, cuya imagen se basa en las antiguas Combi. Mientras que la versión Cabrio, cederá su puesto ante el T-Roc Cabrio.
Cabe recordar que el Volkswagen Beetle nació en 1997 como un modelo que intentó trasladar la filosofía del Escarabajo original (Tipo 1) a las tecnologías del siglo XXI. En 2011, se presenta la actual generación cuyas ventas de apoco han ido disminuyendo haciendo que cada día sea más difícil mantenerlo en las líneas de producción de la Planta de Puebla (factoría, que, por cierto, ha visto nacer tanto a los Beetles clásicos como a los nuevos).
Pero antes de que empieces a entonar Angel Para Un Final o mandes a hacer toallas, debes de saber que no todo está perdido ya que de acuerdo a Herbert Diess, presidente de Volkswagen (como marca), la solución sería convertir al Beetle en un auto 100% eléctrico.
“Si quisiéramos hacer un nuevo Beetle, que fuera eléctrico sería muchísimo mejor, ya que ello nos permitirá hacer un auto de tracción trasera. La plataforma MEB es muy flexible y nos permite hacer vehículos de tracción delantera, trasera y total”, puntualizó el ejecutivo.
Desde el fondo de nuestro corazón… ¡Adiós vaquero!
