Cuesta creerlo, pero es bastante cierto que la relación de Shell con Ferrari data de muchos años atrás, incluso aun antes de ser un partner oficial de la Scuderia. En 1924, fueron los proveedores de combustible y lubricantes para el equipo de Alfa Romeo por el cual un joven Enzo Ferrari corría. Enzo se dio cuenta después que lo suyo iba más por el lado de la administración y tras cinco años decidió hacerse cargo del equipo, confiando nuevamente en Shell.
Luego, cuando Ferrari se independizó y comenzó a forjar su legado de autos deportivos, desde el primer modelo en salir de la planta en adelante, se usaron combustibles y lubricantes de Shell. Y como la alianza estaba siendo conveniente, esto también se traspasó al departamento de competición de Ferrari. De hecho, la primera victoria oficial de Ferrari en Le Mans, fue con un auto cuya sangre era de Shell.
La Fórmula Uno se constituyó oficialmente en 1950 y como se sabe, Ferrari es el equipo más antiguo del campeonato, siendo la única estructura presente incondicionalmente desde sus inicios. Ferrari siempre ha sido sinónimo de la máxima categoría del automovilismo y cuando se constituyó el equipo, Shell pasó a ser directamente un aliado estratégico, donde Ferrari se vería beneficiado por los adelantos de Shell y la empresa de lubricantes usaría la plataforma de Fórmula Uno para mejorar sus productos. La alianza se vio suspendida em 1974, debido a que Ferrari comenzó a usar el apoyo de Agip, la compañía nacional de petróleo en Italia. De hecho, el cambio se puede ver al comparar los monoplazas 312 B3-73 y 312 B3-74 y los auspiciadores que lucía.
Dicha alianza prosperó unos buenos años, hasta que, en 1996, Shell estaba de regreso con Ferrari. Sin embargo, no fue hasta 1999 que los lazos se estrecharon completamente. Desde 1950 hasta hoy son técnicamente 69 años, pero ya saben como son las marcas... prácticamente desde que inicia el nuevo año fiscal, en el mundo de los autos ya es 2020; ahí están los 70 años.
Shell con Ferrari llevan 624 carreras disputadas en la F1, con 176 victorias y 12 pilotos consagrados como campeones.
En la actualidad, Shell no solo dispone de los lubricantes y combustibles. Tienen un pequeño laboratorio que funciona tras los pits de la marca, carrera a carrera, haciendo un análisis de todos los fluidos vitales que se usan en competencia. Así no solo se aseguran de que estos cumplan las cada vez más estrictas normas de la FIA, sino que aprovechan también de prestar ayuda y ver como va evolucionando la vida útil de los propulsores de Ferrari.
Hay que considerar que, gracias a la alianza de Shell, Ferrari ha logrado mejorar la eficiencia de sus autos, traducido en tiempos de vuelta un 21% más rápidos. Esto se debe a que Shell sabe cuanto y como adelgazar sus combustibles para un mejor reparto de masas, así como también proporcionar un combustible que permita evitar los repostajes en pits. Lo mismo con los lubricantes, considerando que la FIA solo permite cuatro motores por temporada, la idea es que la vida útil de estos, sea lo más larga posible, al margen del abuso que sufren en pista; las tolerancias de un motor de carrera son más limitadas que las de un auto de calle.
Cabe mencionar, Scuderia Ferrari utiliza el lubricante Shell Helix Ultra, desarrollado con la tecnología Shell PurePlus, que ha logrado una revolución en la forma en que se formulan los lubricantes para motor.
Este desarrollo tecnológico, patentado por Shell como Gas-to-Liquid (GTL), es el resultado de más de 40 años de investigación y consiste en un proceso que convierte el gas natural en una base lubricante totalmente cristalina, con una pureza de 99,8% que reduce considerablemente la fricción de los componentes del motor, alargando su vida útil y permitiendo un consumo de energía más eficiente.