Hertz, una de las empresas líderes en arriendo de automóviles, con más de 100 años de historia (fue fundada en 1918 por Walter L. Jacobs), se ha declarado en bancarrota a causa de la crisis económica derivada del coronavirus.
A través de un comunicado, Hertz Global Holdings, Inc. precisó que recurrió a la protección del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos para el Distrito de Delaware, tras no conseguir un plan de reestructuración de deuda exitoso. Esta medida, sólo aplica para las filiales estadounidenses y canadienses
La empresa señaló que el impacto de COVID-19 en la demanda de viajes fue repentino y dramático, causando una disminución abrupta en los ingresos de la empresa.
“Hertz tomó medidas inmediatas para priorizar la salud y la seguridad de los empleados y clientes, eliminar todos los gastos no esenciales y preservar la liquidez. Sin embargo, persiste la incertidumbre sobre cuándo volverán los ingresos y cuándo el mercado de autos usados se volverá a abrir por completo. La reorganización financiera proporcionará a Hertz un camino hacia una estructura más sólida que nos ayudará a navegar en lo que podría ser una larga y prolongada recuperación de la economía a nivel global”, señaló la firma.
Hertz también ha aclarado que, pese a esta medida, aún cuenta con la liquidez necesaria para continuar sus operaciones en el resto del mundo, así como en las divisiones Dollar, Thrifty o Firefly.