El preparador alemán Manhart dio una revisada al BMW M2 Competition únicamente con el fin de sacarle más potencia. Y mientras trabajaban en ello, también decidieron hacer algunos cambios en la suspensión, llantas y carrocería. Los resultados no fueron buenos, ¡fueron brutales!
Esta no es la primera vez que este afamado tuner alemán mejora vehículos BMW o de alguna otra marca local. Específicamente, el BMW M2 Competition es un auto con el que ya ha obtenido grandes resultados, así que esta “nueva creación” parecería ser solo cuestión de vanidad y exclusividad, pues únicamente habrá diez paquetes del MH2 500 disponibles del nuevo setting para el mencionado coupé bávaro.
Electrónica infalible
Manhart decidió que no era necesario abrir el motor del M2 para obtener más potencia, sino que bastaba con un buen trabajo en la electrónica. Es así como desarrollaron una nueva ECU (llamada MHtronik) con mapas de potencia especiales, y en el dinamómetro los resultados fueron sorprendentes.
Esta ECU es un nuevo y total estímulo para el motor seis cilindros de 3.0 litros biturbo del M2 Competition, ya que de sus nada despreciables 410 Hp y 550 Nm de torque subió hasta los 518 Hp y 700 Nm, esto es más de 100 caballos de fuerza extra en el motor.
Manhart no ha dado a conocer cifras oficiales de rendimiento, pero se estima que baje varias décimas respecto de los 4,3 segundos que demora el modelo original en alcanzar los 100 km, nada mal para no haber siquiera aflojado un tornillo del motor.
Diseño sobrio y funcional
El paquete MH2 500 de Manhart incorpora una nueva aerodinámica para el BMW M2 Competition, que incluye un lip delantero, un difusor más grande y maletero de fibra de carbono con alerón, además de logos y stickers especiales de la edición.
Las llantas son de 20 pulgadas, progresivas con 9 pulgadas de ancho para los neumáticos delanteros y 10.5 pulgadas para los traseros. Cuenta también con salidas de escape en fibra de carbono de cuatro pulgadas.
Quizás la mejor parte de este paquete MH2 500 desarrollado por Manhart es que si bien luce impresionante, no cae en exageraciones y mantiene tanto la funcionalidad como la sobriedad del auto.
Por ejemplo, en el habitáculo únicamente añadieron una pequeña pantalla que tomó el lugar de la salida de aire izquierda, que informa en tiempo real todo lo que sucede en la máquina. Así, el trabajo hecho por BMW M se mantiene intacto, demostrando la calidad del experimentado Manhart.
Cuando el tuning se hace bien y el preparador tiene experiencia, los resultados son impecables.