Lo primero que resulta curioso de este proyecto de Porsche es el “nombre”, ¿K1? Una nomenclatura que nos recuerda a cierto modelo de una marca coreana, pero que el nuevo SUV grande de la marca alemana usará durante su desarrollo.
Este nuevo Porsche K1 ha entrado ya en la obligada fase de pruebas, confirmando que la marca trabaja seriamente para que llegue puntal a su presentación global en 2027. Puro camuflaje y paneles tapados es lo que principalmente pudieron captar los colegas de CarsCoops, sin embargo, se alcanza a notar que el K1 tendrá dimensiones superiores a las de un Porsche Cayenne, el vehículo más vendido de la marca.
Pero eso está próximo a cambiar, porque debajo de ese disfraz hay una carrocería larga, ancha y bajita que alcanza a revelar una importante distancia entre ejes, ideal si lo que pretende es dar cabida a una tercera fila de asientos tal como Porsche lo ha anunciado.
En cuanto a diseño, podemos notar unos nuevos focos traseros LED, un prominente y minimalista parachoques frontal que, como buen auto eléctrico, carece de parrilla para ventilación del motor y cuenta con algunos biseles verticales, parecidos a los que ha mostrado el facelift del 911.
Lógicamente no hay datos técnicos oficiales, pero Porsche K1 estará erguida sobre la evolucionada arquitectura SSP Sport, por lo que posiblemente se asemeje en potencia al Taycan Turbo GT, por lo que podríamos esperar una potencia alrededor de los 1.093 Hp.
Si bien el 2027 no se ve tan cercano, el tiempo vuela y seguramente tendremos más adelantos -oficiales o no- con respecto a este proyecto electrificado que ha llamado poderosamente la atención.