De todos los cambios que se verán en los bólidos de la Fórmula Uno en 2017, el más esperado es el debut de los nuevos neumáticos, más anchos, a la usanza de los que se usaban en décadas pasadas. Según dice el proveedor oficial de la categoría, traerán una mayor velocidad, más ruido y un mejor espectáculo.
Y estos neumáticos más anchos debutaron esta semana en el circuito de Fiorano, con Ferrari como equipo probador, con Sebastien Vettel primero y con Esteban Gutiérrez después, aunque utilizando el SF-15T, el monoposto de 2015 modificado para simular las mismas cargas aerodinámicas que tendrán desde el próximo año.
La elección de Ferrari no tiene que ver con preferencias específicas por parte de Pirelli, ya que en este proceso de desarrollo también participarán las escuderías Red Bull y Mercedes Benz, ambas con bólidos de la temporada pasada. De hecho, la firma austríaca tomará el relevo desde esta misma semana, pero en Mugello, mientras que la firma alemana lo hará en septiembre en Paul Ricard. En total, entre las tres escuderías se realizarán 24 pruebas antes del final de la temporada 2016.
Como ya se sabía desde mayo pasado, los neumáticos serán sustancialmente más anchos que los actuales en 2017, con el fin de soportar de mejor manera el aumento significativo de la carga aerodinámica que generará el cambio reglamentario, y conseguir una mejora de alrededor de dos segundos por vuelta.
Los neumáticos delanteros aumentarán desde 245 a 305 mm de ancho, mientras que los traseros subirán de 325 a 405 mm. La llanta, en tanto, se mantendrá en 13 pulgadas.
Así, los neumáticos lisos tendrán una medida de 305/670 R13 adelante y 405/670 R13 atrás. Esto significa una superficie de rodadura un 25% mayor que en la actualidad, con una superficie de contacto optimizada en forma y tamaño.
