Juan Pablo Montoya impone récord de aceleración y frenado para el Bugatti Chiron

Evidentemente, el poderío de un súper auto no sólo queda demostrado por la cantidad de poder y/o por la magnifica relación peso-potencia, sino que a la par de la capacidad de aceleración debe tener un desempeño formidable al momento de aplicar los frenos para así contrarrestar de manera sobresaliente cada uno de los caballos de fuerza que contiene.

Partiendo de esta premisa, el Bugatti Chiron es el auto con la mejor capacidad de aceleración y desaceleración, al grado que obtuvo el récord de ir de cero a 400 km/h y una vez más a cero en el menor tiempo posible para un automóvil de producción en serie. En total, este sucesor del Veyron dotado de 1,500 hp registró esta misión en solamente 41.96 segundos.

Para esta maniobra de 0-400-0, certificada por SGS-TÜV Saar, líder mundial en inspección, verificación y certificación de pruebas de aceleración; el Bugatti Chiron al mando de Juan Pablo Montoya tuvo que recorrer únicamente la distancia de sólo 1.9 millas (3.112 kilómetros), una cifra más que también determina el poderío de este súper auto dotado de un motor W16 de 8.0 litros.

Dentro de la telemetría obtenida durante esta prueba quedó asentado que el Chiron únicamente necesito de 32.6 segundos y 2.621 kilómetros para alcanzar la velocidad requerida de 400 km/h para de ahí presionar a fondo el pedal del freno. Es importante mencionar que para esta acción, 0.8 segundos de iniciar el frenado, el alerón trasero, con una anchura de 1.5 metros, se mueve a un ángulo de 49 grados para formar un freno de aire que de acuerdo con Bugatti aumenta la fuerza aerodinámica en el eje trasero en unos 900 kilogramos.

Asimismo, durante el frenado a 400 km/h, la fuerza que obtiene el conductor dentro del Chiron es de aproximadamente 2 G, algo similar a lo experimentado durante el lanzamiento de un transbordador espacial.

Además de la tecnología aerodinámica, nada de esto podría ser logrado de no ser por el sistema de frenos de cerámica de carbono con discos de 420 mm en la parte delantera y 400 mm en la parte trasera. Igualmente, equipa pinzas de freno desarrolladas especialmente para Bugatti con ocho pistones de titanio en cada una de las ruedas frontales y seis en la posteriores.

Una vez combinado el trabajo del freno aerodinámico y mecánico, el velocímetro del Bugatti Chiron finalmente llega a cero después de 9.3 segundos y 491 metros.