El año 2018 se va y nos deja algunos hitos claros y marcados. Lo más llamativo es que algunos de los principales ejecutivos de la industria han terminado en la cárcel por motivos diversos, Rupert Stadler (ex Audi) por el escándalo del diéselgate, Carlos Ghosn (ex Renault Nissan Mitsubishi) por evadir impuestos y falsear datos contables.
Sin embargo, quizás si el más relevante de todos es el inicio de la electrificación en masa, y entendamos eso de “en masa” porque aparecieron los primeros vehículos de producción de algunas marcas que hasta la fecha sólo habían hecho anuncios.
El Audi e-tron y el Mercedes-Benz EQC son los primeros modelos eléctricos de producción de las marcas alemanas, y ambos son SUV, confirmando el camino que ha tomado la industria en materia de formatos. También se presentó el Taycan, el deportivo eléctrico de Porsche, y el Jaguar i-Pace.
Pero la electrificación no será sólo de marcas premium, ya que con la aparición del nuevo Kia Soul se presentó la variante EV, Hyundai sigue triunfando en Europa con el Kona eléctrico, Renault lanzó a la calle el Zoe de segunda generación y, por supuesto, el Nissan Leaf comenzó a abarcar más mercados mundiales.
Eso sin contar con la innumerable cantidad de variantes plug-in o sistemas híbridos ligeros que ya abarcan gamas completas de distintas marcas. Todo esto como respuesta a la caída en picada del diésel como alternativa de movilidad sustentable.
Y es que la historia de este combustible es de altos y bajos. Fue impulsado principalmente por las marcas europeas tras la crisis de los combustibles de los años 70, y fomentado por los gobiernos europeos cuando se comprobó su bajo impacto en gases con efecto invernadero, básicamente el CO2.
Motores ultra eficientes, de bajo consumo y mínimas emisiones de CO2 marcaron la industria europea en los 90 y principios de este siglo, llegando a totalizar casi el 80% de las ventas de autos nuevos en Europa. Pero los nuevos estudios de particulado fino y de NOx, así como el diéselgate del Grupo Volkswagen, marcaron su suerte.
Hoy, el diésel está demonizado, al punto que muchas ciudades ya han anunciado su prohibición para pocos años más, mientras que las marcas ya frenaron todos los desarrollos futuros en pos de la electrificación y de los motores gasolineros ultra eficientes.
Los SUV, los reyes
Según la consultora JATO Dynamics, los SUV fueron los reyes indiscutidos a nivel mundial en 2017, con casi 28 millones de unidades vendidas y un 34% de market share, si bien siguen por debajo de los vehículos de pasajeros, que entre todos los subsegmentos totalizan un 42%.
Para 2018, la proyección es que esta brecha se achique aún más, esperándose una participación global cercana al 38% para los SUV y de un 40% para los autos. Y con todas las regiones creciendo, lo que habla de una real recuperación de los mercados, que proyectan ventas globales cercanas a 90 millones de unidades.
De los 10 mayores mercados mundiales, sólo Japón se mantiene en rojo, mientras que China y Europa muestran un alza superior al 3%. Por el lado de los emergentes, India lidera el crecimiento con un 16%, mientras que Brasil ha crecido por encima del 12%.
¿En qué quedamos en deuda este año? En mayores avances en materia de conducción autónoma, aunque entendemos que la tecnología está, y sigue esperando que los marcos regulatorios de los países se pongan a tono.