Aunque no existe una cifra exacta, es un hecho que el 99 por ciento de los automovilistas alguna vez han tenido que manejar utilizando la reserva de combustible. Ante esta emergencia que inicia cuando se enciende la luz roja del medidor de gasolina, siempre ha surgido la pregunta ¿cuánto aguantará la reserva?
Ojala se pudiera tener una respuesta exacta para esta pregunta y así tener un cálculo para saber cuanto más podemos recorrer. Y es que la reserva de cada automóvil es diferente en cada modelo y esto depende de diferentes factores:
- La capacidad inicial del vehículo.
- El sistema de medición del combustible.
- El momento en que inicia el aviso de reserva.
- El estilo de conducción.
Teniendo en cuenta lo anterior, hay que quitarnos de la cabeza esa teoría de que una vez encendida la alerta de la reserva del medidor nos quedan 50 kilómetros de autonomía.
Incluso descubriendo la distancia que se puede recorrer, no es posible aplicarlo para todos los demás modelos del mismo fabricante, pues esta cifra puede cambiar de un modelo a otro. A esto hay que sumar los factores anteriores y el estilo de conducción, y que este puede ser más agresivo ante la situación de estrés originado por la poca gasolina que hay que en el depósito.
Cómo saber la autonomía de la reserva de combustible
Aunque lo usual es que la reserva de un automóvil sea más o menos el 15 por ciento del espacio del depósito de gasolina, lo mejor es no confiarse y consultar el manual del propietario del vehículo.
Por ejemplo, para un vehículo que posee un tanque de combustible con una capacidad de 56 litros, una vez que enciende la alerta de reserva, quedan aproximadamente 8.6 litros. Así que ¡cuanto más grande sea el vehículo, más litros tendrá la reserva!
Las contraindicaciones de conducir con la reserva
Además del estrés que genera conducir con poca gasolina, esto perjudica al automóvil, ya que la mecánica del depósito está pensada para trabajar de forma óptima cuando está lleno. Cuanto más aire tenga dentro, es decir poca gasolina, aumenta la posibilidad de que las impurezas que hay en el tanque pasen al proceso de combustión, lo que afecta el desempeño del vehículo.
De igual manera, la gasolina es un líquido muy volátil, por lo que tener el tanque vacío hace que el combustible se evapore más rápido que cuando está lleno.