Cuando se mueve sobre la carretera luce y se conduce como un SUV convencional, y en terrenos irregulares es un consistente y confiable vehículo 4x4. ¿Y cuál es la diferencia? Que el Amphicruiser tiene, además, la posibilidad de meterse en el agua para navegar como un bote.
Basado en el Toyota Land Cruiser, este vehículo anfibio tiene la capacidad de entrar y salir del agua sin tener que detenerse, pues tiene la virtud de transformarse con solo presionar un botón. Cuando se trata de desempeñarse como una embarcación, el Amphicruiser puede navegar en aguas profundas, incluso el mar, y desarrolla una velocidad de 5 nudos (9 km/h).
Al igual que en tierra firme, la dirección y aceleración de este vehículo se realiza por medio del volante y los pedales, haciendo que este automotor anfibio pueda ser utilizado por cualquier conductor, pudiendo llevar hasta ocho pasajeros.
Sobre el asfalto, el Amphicruiser es un SUV normal y puede ser conducido cómodamente a velocidades de hasta 135 km/h. Cuando se trata de aventurarse en el off-road, su desempeño está totalmente garantizado al estar basado en el reconocido Toyota Land Cruiser. Los creadores de este anfibio, Dutch Amfibious Transport, permiten que el cliente elija entre motores V8 turbo o un L6 Diésel, un V6 de gasolina o un sistema eléctrico, que lo convierte en un cero emisiones.
Con respecto a la carrocería, las puertas están a una altura regular, solo que se aplicaron sellos inflables para alcanzar la máxima impermeabilidad; por su parte, toda la estructura es de aluminio, salvo el capó y el techo, que están construidos en fibra de vidrio.
Amphicruiser