Desde la aparición del brote de coronavirus COVID-19 en China, ha surgido un problema sanitario que al día de hoy abarca a más de 40 países. Esta situación ha hecho que diversas organizaciones, institutos y empresas se pongan a trabajar a marchas forzadas para atender y encontrar una solución al virus que ya ha matado a miles de personas.
Dentro de la lista de empresas que están tratando de contener la propagación de la epidemia es la compañía china XAG, que ha desarrollado un arsenal de más de 2.600 drones y robots para desinfectar las áreas afectadas, lo que ayuda a proporcionar soluciones para mejorar la higiene pública y reducir el riesgo de transmisión de virus a través del contacto con la superficie contaminada.
De esta manera, mientras los científicos mundiales se dedican a acelerar el diagnóstico y las vacunas de este virus altamente contagioso, las tecnologías de automatización también contribuyen en la primera línea. Por ejemplo, los drones y los robots están reemplazando los pulverizadores manuales para liberar desinfectante en lugares públicos, sin tener que exponer a los operadores.
Basado en tecnologías avanzadas como el control robótico, la conducción automatizada y la operación de alta precisión, el robot y dron de XAG se pueden adaptar fácilmente para abordar la necesidad urgente de una desinfección rápida y precisa.
En lugar de operar de forma independiente, el dron y el robot pueden combinarse para cosechar los beneficios de la desinfección contra el nuevo coronavirus. Cubriendo un área mucho más amplia desde el aire con velocidad de vuelo variable, un dron XAG en un día puede desinfectar 600.000-700.000 metros cuadrados al máximo, una tarea normalmente requeriría 100 trabajadores para completar.
Sin embargo, el dron tiene sus limitaciones, ya que no puede volar en ciertos puntos, por lo que ahí es donde circulan estos pequeños robots. Como una especie de vehículo utilitario, este aparato llamado R80 funciona para la pulverización, el monitoreo y el transporte de cultivos de precisión.
Aunque originalmente está diseñado como un robot, el R80 también se puede aplicar en varios escenarios, como la desinfección, utilizando un spray inteligente de alta velocidad de 360°. Con una capacidad de 80 litros y un sistema de navegación especial, este dispositivo no tripulado ágil puede atravesar espacios estrechos, evitar automáticamente obstáculos y desinfectar áreas específicas desde diferentes ángulos, sin callejones sin salida.
El coronavirus COVID-19 que brotó por primera vez en Wuhan (China) a fines de diciembre de 2019, se ha convertido en una amenaza global, con 50 países en todo el mundo reportando 83,310 casos confirmados y 2.858 muertes hasta ahora.