A diferencia de otras compañías de blindaje de vehículos, AddArmor ofrece una amplia variedad de automóviles blindados. Así como puede desarrollar un sedán o un SUV anti balas, puede crear un super auto o una pickup capaz de resistir cualquier tipo de ataque.
Debido a que la mayoría de los vehículos que desarrolla esta compañía son sumamente capaces en cuestión de aceleración y emplean materiales sumamente ligeros, entonces la dinámica de conducción es casi la misma a la que ofrece antes de llegar al taller.
Un ejemplo de esto se puede ver en este Ford F-150 Raptor que tras ser mejorado por Hennessey Performance fue blindado por AddArmor. Al contrario de muchos vehículos de su tipo que pierden relación peso-potencia y estabilidad, el VelociRaptor ve casi intactas sus cifras.
Esto se debe a que el taller no emplea acero para el blindaje, sino que una fibra sintética llamada Dyneema que es 15 veces más resistente que el acero y 40 por ciento más ligero que el Kevlar.
Estas propiedades permiten que el material sea capaz de resistir balas AK-47 y artefactos explosivos, lo que significa que puede homologarse para ofrecer protección balística de nivel B4, B5, B6 y en casos extremos, incluso B7.
Pero además de proteger a los pasajeros de cualquier ataque con arma de fuego o explosivos, esta pickup blindada tiene una serie de dispositivos que elevan la seguridad al máximo.
Incluye un cañón de sonido de contraataque, manijas con descarga eléctrica, defensas de acero, llantas todoterrreno antipinchazos, una sirena, luz estroboscópica, sistema de intercomunicación y capacidades de escaneo de bombas. La realidad, supera a la ficción.
Al final, esta Hennessey VelociRaptor blindada, es impulsada por un motor V8 Supercargado de cinco litros. Con 758 Hp, alcanza los 100 km/h en 4,1 segundos, una cifra espectacular si se tiene en cuenta que pesa 2.7 toneladas.