El inglés Bernie Ecclestone, quien fue el mandamás de la Fórmula 1 hasta 2016, sorprendió al mundo del automovilismo al reconocer en un documental que trata sobre su vida que sobornó a la entonces masajista de la categoría para influir en el resultado del Gran Premio de Las Vegas de 1981 y permitirle al brasileño Nelson Piquet ganarle el campeonato al argentino Carlos Reutemann.
Según contó el propio Ecclestone en Lucky, que está disponible en Star+, tras el primer día de prácticas de la carrera que se realizaba en el estacionamiento del Caesar’s Palace era evidente que los pilotos tendrían problemas con el dolor de cuello.
La confesión de Ecclestone en "Lucky"
“Carlos habló con la masajista que se encontraba en boxes. Yo fui a ver a esta persona y después de una discusión financiera, decidieron favorecer a Nelson”, relató Ecclestone, entonces propietario de Brabham y jefe de Piquet. “Ganamos el campeonato de 1981 y fue el final para Carlos, que dejó de correr poco después”, recordó el magnate británico de 92 años.
A 42 años del episodio, Ecclestone por fin reveló la verdad sobre aquel campeonato plagado de irregularidades. Reutemann, quien corría con Williams, estuvo a un punto de ganar un Mundial de F1, pero fue superado por Piquet por una mínima diferencia.
A pesar de no haber ganado el título, Reutemann es recordado como un piloto talentoso y profesional. En su campaña en la categoría ganó 12 carreras y compitió en las escuderías más importantes de aquel momento, incluyendo Brabham, Ferrari, Lotus y Williams.
Este escándalo sacude al mundo del automovilismo y pone en tela de juicio la integridad de la competición. Sin embargo, también demuestra la determinación y la astucia de Ecclestone en su lucha por el éxito.
