Debido a que los motores eléctricos generan grandes cantidades de torque desde casi cero rpm, los vehículos EV suelen usar una relación de transmisión fija, es decir, no tienen cambios; pero esta ventaja tiene sus límites.
En el caso de muchos autos eléctricos vemos que la velocidad final no es muy alta en relación a su potencia y eso tiene que ver con que el motor llega a su límite de giro, pero no hay una marcha más multiplicada para aprovechar su torque.
Si el vehículo está pensado para off-road, el compromiso es más grande, porque además de la velocidad rutera, también tiene que estar preparado para “hacer fuerza” a muy bajas velocidades.
La bici como ejemplo
Si no estás familiarizado con la idea de desmultiplicación y multiplicación, el mejor ejemplo es la bicicleta y la relación entre la cantidad de pedaleadas vs. los giros de las ruedas y la velocidad.
Cuando quieres arrancar notas que tienes que hacer mucha fuerza, por eso en las bicis con cambios vas a los más bajos (los piñones de rueda más grandes).
Una vez que ganas velocidad, notas que pedaleas mucho pero avanzas poco, ahí seleccionas los cambios más altos (piñones más chicos) y te mueves más rápido con menos pedaleo.
Además de lo anterior, en muchas bicicletas tenemos dos o tres “platos” del lado de los pedales, el más chico desmultiplica toda la relación y es el que se usa en terrenos difíciles, especialmente trepadas, dónde la fuerza es más importante que la velocidad.
Algo similar pasa con los vehículos, los piñones traseros son como los cambios de la transmisión y los platos como la reductora que le permite los todoterreno aprovechar la fuerza del motor para hacer offroad.
Reductora en los todoterreno eléctricos
La imagen de la patente de Ford
Actualmente la mayoría de los modelos eléctricos que ofrecen tracción a las cuatro ruedas lo hacen colocando un motor en cada eje, lo que además permite variar la fuerza en cada uno sin la necesidad de un diferencial.
Este sistema que acaba de patentar Ford no explica mucho, pero claramente se trata de una reductora montada sobre el eje, con entrada de fuerza mediante un motor eléctrico y sin sistema de embragues de fricción, con o sin sincronizadores.
El caso Porsche
Si queremos marcar un precedente, recordemos que Porsche utiliza una caja de cambios de dos velocidades en el Taycan, con el fin de alcanzar más velocidad sin sacrificar tanta autonomía. La única diferencia está en que los motores eléctricos tienen torque plano a cualquier giro del motor, no como uno a combustión cuya potencia y torque depende de una curva, para la cual necesitamos más cambios para aprovecharla sin perder velocidad. Es por eso que no se necesitan cajas de cambio o reductoras en la mayoría de los casos.
¿Se colocará un motor por eje unido a esta reductora? Parece ser que sí; lo que sabemos también es que Ford está trabajando en una variante offroad de la F150 Lightning 100% eléctrica y que sería una muy buena manera de diferenciarse de la competencia, al menos en modelos a baterías con auténtico carácter todoterreno.
¿Podremos ver una Raptor-E o una Bronco-E con esta tecnología?