Para Volkswagen, el volcarse a un futuro eléctrico total tan rápido como quería resultó ser un camino demasiado tortuoso. Algunos modelos como el ID.3 simplemente no se vendieron como lo proyectaron, y otros perdieron interés rápidamente. Por ello ahora el grupo alemán busca retomar el buen camino al formar una colaboración grande con Rivian.
Rivian es otra startup estadounidense que se dedica a fabricar autos eléctricos. Desarrollan su propio software, tren motriz y, básicamente, todo lo esencial para crear un auto eléctrico, aunque por ahora tienen una operación modesta con unas pocas miles de unidades producidas por mes.
Por el momento solo ofrece dos productos, un SUV (R1S) y una pick-up (R1T), ambos compartiendo plataforma, baterías y trenes motrices, pero además producen furgones de última milla para algunas empresas en asociación como AT&T. A pesar de ello, sus productos han sido muy bien recibidos y cada día ganan más popularidad.
Hace no muchas semanas, Rivian presentó un agresivo plan de nuevos productos, con los conceptuales R2, R3 y R3X, todos ellos pensados para producirse en una nueva plataforma para vehículos medianos con un nuevo software de gestión vehicular (SDV o software-defined vehicle) . Y aquí puede estar el interés de Volkswagen.
La inversión de Volkswagen será de $5.000 millones de dólares, cantidad de dinero que será entregado a través de distintas transacciones durante los próximos dos años, con 1.000 millones a transferirse inmediatamente.
Con esta inversión, VW podrá usar las plataformas de Rivian y hasta el software de sus autos, simplificando totalmente el tormentoso desarrollo de una plataforma eléctrica desde cero (basta ver lo que costó sacar el Audi Q6 e-tron).
Según fuentes como Reuters, Rivian ya comenzó a hacer distintas pruebas de sus sistemas sobre productos de Volkswagen, y muchos de sus elementos dicen ser ya compatibles con los VW eléctricos actuales.
Sin embargo, Volkswagen planea usar toda esta tecnología para su siguiente generación de productos eléctricos con el fin de poder integrarlos de la mejor manera posible. Cabe destacar que esta asociación se dió debido a que la propia división de software para autos eléctricos de Volkswagen, Caridad; tuvo muchos problemas para desarrollar nuevos elementos que pudieran ser usados tanto en VW, Audi, Porsche y otras marcas más del grupo.
Para Rivian, la colaboración también resulta ser una gran ayuda, pues con ello serán capaces de mejorar y tal vez adelantar el desarrollo de sus R2 y R3, productos que presentaron hace poco y que realmente crearon mucha conversación.
Por ahora solo queda esperar el resultado de la colaboración entre ambas marcas para ver que tienen preparado a futuro.