La industria automotriz, al menos en Europa, ve con cierta preocupación la llegada de 2025, debido a que desde el 1 de enero próximo, los fabricantes deberán cumplir exigencias más estrictas en lo que a emisiones de CO2 de sus modelos se refiere. De hecho, la Unión Europea rebaja el promedio desde 115,1 gramos por kilómetro a 93,6 gramos por kilómetro, las que están contenidas en la llamada normativa CAFE, que viene del acrónimo inglés "Clean Air For Europa", la que a contar de 2020 estableció los límites progresivos para todos los fabricantes en el camino de la llamada descarbonización, apuntando a la rápida "electrificación" del sector, y que de no llevarlo a cabo se exponen a multas millonarias.
Corría el verano europeo de 2022, y el ex consejero delegado de Stellantis, Carlos Tavares comenzó una campaña en pos de que el Grupo abandonase la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA), acusando a la entidad de tener poca capacidad de influencia, especialmente en lo que dice relación a la prohibición de facto de vender vehículos a combustión a contar de 2035 o el retraso de la aplicación de multas a los fabricantes que no cumplan en 2025 con los límites de emisiones anticontaminantes. Esto lo llevó a abandonar el organismo a inicios de 2023.
La Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) representa a los 15 principales fabricantes de automóviles, furgones, camiones y buses con sede en Europa: BMW Group, DAF Trucks, Daimler Truck, Ferrari, Ford of Europe, Honda Motor Europe, Hyundai Motor Europe, Iveco Group, JLR, Mercedes-Benz, Nissan, Renault Group, Toyota Motor Europe, Volkswagen Group y Volvo Group.
Pero bueno, quien sale sin que lo echen, vuelve sin que lo llamen, reza el conocido refrán. Stellantis difundió este fin de semana un comunicado en el que manifiesta su intención de volver a formar parte de la ACEA. "La ACEA acoge con satisfacción la solicitud de Stellantis de volver a unirse a la asociación. Dada la crisis de competitividad sin precedentes que atraviesa Europa y la necesidad colectiva de afrontar los desafíos de la transformación ecológica, es más importante que nunca permanecer unidos. Los miembros de la ACEA pueden ser competidores en el mercado, pero todos comparten el mismo objetivo: una transición competitiva y sostenible hacia una movilidad de cero emisiones, en una Europa que pueda mantenerse firme a nivel mundial. Seguiremos trabajando en ello con todo nuestro empeño y compromiso”, afirmó Luca de Meo, presidente de la ACEA y director general del Grupo Renault.