El 1 de septiembre de 2025, JLR fue víctima de un agresivo ciberataque que la obligó a interrumpir sus servicios informáticos y paralizar sus procesos productivos a nivel global, creando problemas con los pedidos de piezas y proveedores, lo que le acarreó pérdidas en ingresos cifradas sobre los USD 2 mil millones, con desplomes considerables en sus niveles de ventas.
Sin embargo, desde el 8 de octubre pasado comenzó un paulatino reinicio de operaciones, partiendo por el Centro de fabricación de propulsión eléctrica (EPMC), donde la empresa construye motores, y su Centro de ensamblaje de baterías (BAC), ambos en West Midlands, Reino Unido. También comenzaron a regresar a las operaciones de estampado de la compañía en Castle Bromwich, Halewood y Solihull, Reino Unido, y otras áreas clave de su planta de producción de vehículos de Solihull, como su taller de carrocería, taller de pintura y su Centro de Operaciones Logísticas (LOC), que suministra piezas a los sitios de fabricación globales de JLR.
Esta actividad será seguida de cerca por la fabricación de vehículos en Nitra, Eslovaquia, y el reinicio de las líneas de producción de Range Rover y Range Rover Sport (MLA) en las instalaciones de Solihull.
Nuevo plan de pagos a proveedores
Por otra parte, JLR ahora está acelerando un nuevo plan de financiamiento que brindará a los proveedores de JLR calificados efectivo por adelantado durante la fase de reinicio de la producción.
Desde el incidente cibernético, JLR ha introducido soluciones para apoyar a sus proveedores, incluido el establecimiento de un servicio de asistencia dedicado a los proveedores y la implementación de un sistema de pago manual para liquidar facturas pendientes, y esta semana el restablecimiento de sistemas de pago automatizados a proveedores.
Con el nuevo programa, los proveedores de JLR que cumplan los requisitos recibirán pagos mucho más rápido que con sus condiciones de pago estándar, lo que mejorará su flujo de caja a corto plazo. Tras una fase inicial con los proveedores de JLR que cumplan los requisitos, crucial para la reanudación de la producción, el programa se ampliará para incluir a algunos proveedores no relacionados con la producción. su liquidez, tras la interrupción del negocio desde el incidente cibernético.
