Fue en abril pasado durante el Auto Show de New York, cuando Kia presentó al mundo la segunda generación del Cadenza, y ahora viajamos a Middelburg (Virginia) para tener nuestro primer contacto con este sedán, que por precio y dimensiones está ubicado entre sus hermanos Quoris y Optima.
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Desde su aparición en 2010 como reemplazo del Opirus y tras el restyling recibido en 2014, el Cadenza lució un estilo muy en línea con toda la gama, incluyendo el frontal "Boca de Tigre" que le dio homogeneidad a la gama de automóviles de Kia. Pero ahora, con el arribo de esta nueva entrega, la marca deja en claro que se trata de un automóvil completamente distinto a sus consanguíneos.
Y es que a diferencia del Quoris y del Optima, inclusive el resto de la gama, el Cadenza 2017 se destaca por tener un frontal distinto, una especie de evolución más elegante de la tradicional cara de Kia. Para esta ocasión, los diseñadores de la marca en California, bajo la supervición de Peter Schreyer, mantuvieron las líneas generales de la parrilla, pero reemplazaron la grilla tipo panal para incorporar otra con un diseño de más de 20 ranuras verticales. Y como ya se ha hecho costumbre con los últimos modelos, habrá un diseño para las versiones básicas, y otra disponible para la línea GT Line.
Otro de los elementos de la carrocería que han evolucionado son los grupos ópticos de LED, que disimulan en el interior la letra Z, y las llantas de 18 o 19 pulgadas. Asimismo, el coeficiente aerodinámico ha mejorado al pasar de 0.29 a 0.28 Cx. Respecto a las dimensiones, el Kia Cadenza 2017 mide 4.970 mm de largo, 1.869 mm de ancho, 1.470 mm de alto y 2.855 mm entre ejes, por lo que comparado con su antecesor es 18 mm más largo (10 de ellos entre los ejes), 20 mm más ancho y cinco mm más bajo.
La silueta es baja, alargada y elegante, muy en sintonía con los volúmenes que están mostrando los sedanes más hermosos y refinados del mercado.
Habitáculo
A la par del exterior, el interior de la segunda generación del Cadenza es más moderno que su antecesor. Ahora encontramos un tablero con líneas más refinadas, materiales -plásticos, cuero, madera- de mucho mejor calidad y una combinación de tonos que dan un aspecto agradable.
Si el anterior Cadenza destacaba por el amplio espacio para los pasajeros, ahora, con el incremento de la distancia entre ejes, la habitabilidad es bastante mayor, principalmente para quienes viajan en la fila trasera. El volumen del maletero, en tanto, apenas creció de 450 a 455 litros.
Aunque no se trata de un vehículo premium y su foco está puesto en los sedanes grandes de marcas generalistas (Honda Accord, Hyundai Azera, Mazda 6), podemos ver que el interior cuenta con todo lo necesario para competir sin pudor con la gama más pequeña de las marcas premium (Volvo S60, BMW Serie 3, Audi A4). Destacan el cuero Nappa en los asientos y partes de los paneles de las puertas, el techo y pilares son cubiertos de gamuza, el volante y palanca de cambios forrados de cuero, el techo panorámico que abarca ambas filas, así como la tecnología enfocada al confort y seguridad.
Sin importar la versión, Kia ofrece en el Cadenza pantalla táctil de ocho pulgadas, navegador, Android Auto y Apple CarPlay, cargador inalámbrico y head-up display a color, entre otros De manera opcional es posible agregar un sistema de audio Harman Kardon de 630 watts y 12 parlantes, calefacción en el volante, asientos ventilados y calefaccionados, y apertura inteligente del maletero.
Conducción
No obstante que el Kia Cadenza 2017 ocupa el mismo motor V6 de 3.3 litros, la dinámica de conducción muestra sustanciales mejoras por el nuevo chasis, que ofrece un 35% de mayor rigidez, por la nueva caja automática de ocho velocidades que reemplaza a la de seis, y por el peso total del auto, reducido en 20 kilos a 1.664 kilos. Igualmente, los ingenieros trabajaron para desarrollar una suspensión que filtra mejor las imperfecciones del camino, una dirección eléctrica más precisa gracias a un software con el doble de bits, y un sistema de frenos más potente, con discos delanteros que crecieron de 280 a 304 mm de diámetro, y los traseros de 278 a 282 mm.
Durante nuestra ruta de manejo a lo largo de 260 kilómetros en las carreteras que circundan a Middelburg, pudimos constatar que la calidad de marcha del Cadenza es superior no sólo frente a su antecesor, sino también con algunos de sus rivales. Al no ser un motor turbocargado la respuesta que tenemos al pisar el acelerador es instantánea, inclusive con las mejoras para hacer más eficiente el seis cilindros y la pequeña reducción de potencia, de 293 a 290 Hp a 6.400 rpm y 343 Nm de par a 5.200 rpm. Por su parte, el consumo de combustible es de 8,5 km/litro en ciudad y 12 km/l en carretera, lo que da un promedio de caso 10 km/litro, para una autonomía de 690 kilómetros.
A pesar de su longitud, en los caminos subvirados y pendientes que estuvieron presentes en nuestro camino, el tacto de la dirección es sumamente preciso y los amortiguadores están calibrados más pensando en el confort que en el dinamismo, pero aún así afirman muy bien la carrocería. Si se requiere de un poco de deportividad, basta hacer los cambios por medio de las paletas detrás del volante y pasar el modo de manejo a Sport. Así se obtiene una mejor respuesta del acelerador. Además de este modo deportivo, está el nuevo modo Eco, que administra el poder para no mal gastar combustible. También hay modos Normal e Intelligent, que detecta el estilo de manejo del conductor y así ofrecer su mejor papel. Algo que también llama la atención es la insonorización de la cabina, perfectamente bien logrado por Kia.
Será a partir de octubre cuando el Kia Cadenza 2017 inicie su recorrido comercial en Estados Unidos. Para Chile no hay fechas publicadas, pero considerando lo rápido que va Indumotora en materia de lanzamientos, no es de extrañar que lo tengamos en el país antes de que finalice el año.