A tan sólo unas semanas después de haber lanzado el facelift de la tercera generación del Octavia, Škoda aprovecha de estrenar los cambios en su modelo tope de línea: el nuevo Octavia RS, el que llega con una personalidad dinámica, un novedoso diseño exterior, un interior deportivo y cuatro configuraciones: motores diésel y gasolina; formato sedán y tourer.
A todas luces, el elemento más distintivo de esta generación, está en los ópticos frontales LED con sistema activo de iluminación frontal (AFS), los cuales parece que estuvieran cortados por la mitad, con la porción interior unida a la grilla frontal, más voluminosa y luciendo un diseño tipo panal. Hacia atrás, se mantiene el estilo recatado de los otros Octavia RS, con un spoiler deportivo
Puertas adentro encontramos butacas modelo RS-Sport tapizados en tela y cuero con opción de forro en Alcántara, además de un volante deportivo, elementos que resaltan la personalidad más exuberante de esta versión.
Dinámicamente hablando, este nuevo Škoda Octavia RS ofrece una suspensión deportiva 15 mm más baja y 30 mm más ancha que la de su predecesor, mientras que los caliper rojos en los frenos recalcan el hecho de que estamos ante una versión potenciada. Cuenta con llantas de 17” como estándar, pero también ofrece de 18” y 19” como opcionales. Para seguir disfrutando de su conducción, el RS ofrece un modo de conducción Performance y como opcional un generador de sonido Performance, que amplifica el sonido del motor vía una emulación sintética. A esto se añaden, el programa de estabilidad ESC, el diferencial de bloqueo electrónico XDS y el control dinámico de chasis (DCC) con tres modos de conducción: Comfort, Normal y Sport. Todos estos elementos ya los conociamos del RS pre-facelift.
La oferta de motores se mantiene, incluyendo al 2.0 TSI de 230 Hp y 350 Nm a 1.500-4.600 rpm, lo que le permite alcanzar de 0 a 100 km/h en sólo 6,9 segundos y una velocidad máxima de 250 km/h. Por su parte, el segundo propulsor 2.0 TDI ofrece 184 Hp y un par máximo de 380 Nm desde las 1.750 rpm, asegurando una aceleración de 0 a 100 km/h en 7,9 segundos y una velocidad máxima de 230 km/h.
¿En Chile lo veremos? Sería interesante conocerlo el próximo año, si bien no existen mayores informaciones al respecto.
