Así es el GT 4-Doors Coupé, el Mercedes más caro de todos

Hace unos meses, Mercedes-AMG presentó una versión de cuatro puertas de su hermoso deportivo GT, con el poco trabajado nombre de GT 4-Doors Coupé, o traducido (que queda aún peor), GT Coupé de cuatro puertas.

Y es que el diseño emula al del Porsche Panamera para ofrecer una propuesta más deportiva y única, distinta a la que puede dar, por ejemplo, un clásico Mercedes-Benz S63 AMG y sus tres cuerpos bien marcados.

Este modelo acaba de hacer su debut dinámico en el Festival de la Velocidad de Goodwood, donde, además, aprovechó de liberar los precios con que se venderá en Europa, siendo Alemania su primer destino (obvio), para luego expandirse a otros mercados continentales y globales.

Y como ya se había informado, este nuevo vehículo de la división deportiva de la marca se ofrecerá en versiones GT63 y GT63 S, dejando para más adelante un más abordable GT53. ¿Los precios? En Alemania costarán 150.118 euros el primero y 167.016 euros el segundo, algo así como US$175.000 y US$195.000, respectivamente.

Pero, vaya sorpresa, habrá una versión exclusiva que sólo se venderá los primeros 12 meses, denominada GT 63 S Edition 1, que asumirá el rol de ser el auto más caro de Mercedes-Benz, al menos hasta que aparezca el Project-One.

Esta edición especial tiene un precio de lista de 185.342 euros, unos 216 mil dólares, que supera el valor con que se ofrecen otros íconos de la marca, como el S63 (€161 mil), el SL63 (€162 mil) y el GT R Coupé (€166,6 mil).

¿Tanto dinero por un auto así?

Conociendo el 4-Doors Coupé

Más allá de la ostentación que conlleva este tipo de diseños que mezclan funcionalidad con deportividad, iniciado con el Mercedes-Benz CLS y continuado por muchos modelos incluyendo el Audi A7, el Mercedes-AMG GT S 4-Doors Coupé cobra su valor en su paquete mecánico y sus prestaciones.

Equipa el motor V8 4.0 biturbo que conocemos de muchos modelos de AMG (y Aston Martin), que en este caso eroga 640 caballos de fuerza y 900 Nm de par, siendo el modelo de calle más potente de la marca.

Está asociado a una caja de nueve velocidades y al sistema 4-Matic, que incluye un diferencial trasero autoblocante, y con los cual ofrece cifras impresionantes considerando que esta berlina de cinco puertas pesa 2,1 toneladas: 3,2 segundos en el 0 a 100 km/h y 315 km/h de velocidad máxima.

Construido sobre la base del Clase S de nueva generación, el AMG GT 4-Doors Coupé incluye muchos elementos propios para darle un carácter más deportivo: las ruedas posteriores dieccionales, la aerodinámica activa, la suspensión de aire adaptativa y un Drift Mode, que dejará el auto en tracción trasera, permitiendo que derrape a placer. Y todo eso sin contar con el paquete clásico mecánico de AMG, que incluye dirección, transmisión, frenos y tracción deportivos.

El diseño tiene mucho que ver con el GT coupé tradicional, con un capó largo y cuerpo movido hacia atrás. En este caso, la línea del techo fue alargada y hecha caer suavemente sobre el final, que más que maletero tradicional es un portalón, el que finaliza con luces LED y una cuádruple salida de escape, y en este caso puntual de la Edition 1, un alerón fijo.

¿Es bello? Depende de los gustos personales, pero en vivo se ve grande y poco delicado.

El habitáculo es una mezcla entre la deportividad del AMG GT, la elegancia de un Clase S y la tecnología de un Clase E. La doble pantalla de 12,3” son obvias en este auto, así como las salidas de aire circulares.

Hay mucho cuero y fibra de carbono, así como aluminio en una infinidad de insertos. Y el volante, tremendo en tamaño y diseño, ofrece superficies de tacto para cambiar algunas funciones.

La novedad en este auto son las dos puertas posteriores y las plazas para pasajeros, que pueden ser dos o tres, según escoja el cliente. En caso de elegir las posiciones individuales, la marca ofrece una consola central que incluye una pantalla desde donde manejar varias funciones del auto.

El paquete Edition 1 (que cuesta tanto dinero más) añade en exclusiva un paquete aerodinámico AMG, que incluye un divisor delantero más grande para canalizar mejor el aire, aletas integradas en el parachoques, un difusor optimizado y el mencionado alerón fijo.

A eso añade llantas forjaras de 21 pulgadas con radios cruzados, pintura gris grafito Magno, asientos AMG Performance en cuero Nappa gris y negro con contrastes amarillos, volante forrado en microfibra, y un acabado especial en fibra de carbono.

¿Y qué tal su debut en Goodwood? Como hemos dicho, pocos autos nuevos salen a hacer tiempo aquí, sino más bien a mostrarse. Nos gustó el sonido del motor, la ligereza con que parecía moverse, y la capacidad de acaleración. No se veía para nada torpe, y eso, en un auto de este tamaño, es un buen indicio de la forma en que fue concebido.