Y bueno, llegó el nuevo 911 de Porsche, un auto que ya hemos reporteado en Autocosmos, pero al que le faltaba lanzarse oficialmente en el país. Y nos alegramos porque al fin lo podemos conocer en vivo. Pero, a decir verdad, el auto nos impactó más que la generación anterior, aunque eso se lo debo a que -me guste o no- soy un millenial. Y si eres como yo, probablemente ya notaste la razón de por qué; su diseño.
"Oye, pero si es igual que el anterior." Podemos decir que sí, pero son los detalles los que valen la pena. Por ejemplo, los focos delanteros (que son de cuatro puntos y pueden considerar una matriz de LED) ya no cortan el parachoques frontal, sino que vuelven a formar parte de los pasos de rueda. También el capot frontal tiene un corte recto y presenta un calado central. Y el ancho de los pasos de rueda ya no es exclusivo de los modelos más grandes. Y los focos LED traseros en una sola tira larga que usa el ancho completo del auto (algo que se repetía también en los 4S). Es imposible no acordarse del Porsche 964 y en los libros de cualquiera, eso es bueno.
De dimensiones, el nuevo 911 mide 4.519 mm de largo, 1.852 mm de ancho, 1.300 mm de alto y 2.450 mm entre ejes. Pesa 1.515 kilos y presenta un coeficiente de arrastre de 0,29 cx. Comparado a un Porsche 911 de la generación anterior, es más corto y conserva la misma distancia entre ejes, pero si es más ancho, específicamente 45 mm en el tren delantero y 44 mm en el tren trasero. También el nuevo 911 lleva llantas de diferente tamaño, de 20" adelante y 21" atrás, para mayor agarre.
La aerodinámica se ve mejorada gracias a un nuevo spoiler desplegable del ancho del 911. Este se ajusta según distintos requerimientos del auto, incluso si necesitas ahorrar combustible.
La suspensión PASM adaptativa cuenta con nuevos elementos físicos para un rango mucho más amplio entre suavidad y rigidez. E incluso, gracias a que toda la electrónica del auto se conecta via fibra óptica, las reacciones son tan rápidas, que cada amortiguador, puede regular su propia rueda de modo independiente.
Un boxer que te dejará K.O.
Vamos a su motor. Si antes el GTS era el punto intermedio de la gama, ahora el 911 comienza donde quedamos con el GTS, lo que significa que los futuros modelos serán mucho más potentes. La nueva unidad de potencia del 992, es como siempre un bóxer biturbo de seis cilindros y tres litros, con 530 Nm de torque, lo que significa que gana 30 Hp y 30 Nm por igual. La caja de cambios es de ocho velocidades, pero la verdad es que, si quieres correr, con la sexta te bastará para alcanzar los 308 km/h. Las otras dos, son para desatorar.
Este motor tiene varias novedades, por ejemplo, los turbos son más grandes y giran en dirección opuesta. Según Porsche, esto es para mejorar los flujos y eliminar vibraciones. La válvula de wastegate también se regula de manera eléctricamente. Citaré textual a mi Editor en Jefe Rubén Hoyo, quien fue a maltratarse a la pista de Hermanos Rodríguez junto al 992 y a la gente de Porsche (puedes leer su toma de contacto aquí): "También, las válvulas de admisión tienen una carrera distinta, una abre más que otra y esto se traduce en la posibilidad de generar un flujo en espiral dentro de la cámara, lo que en conjunto con unos nuevos inyectores piezoeléctricos mejoran la combustión. Asimismo, el sistema de enfriamiento también es completamente nuevo, los intercoolers están arriba, justo debajo de la parrilla que está después del medallón, lo que mejora el flujo de aire y permitió que fueran más grandes, incrementando la eficiencia."
El nuevo 911 logra detener el cronómetro cinco segundos antes que su predecesor en Nürburgring, con un tiempo de 7:25.
El intercooler cambia, los filtros de aire fueron reubicados para una mayor eficiencia (y más fácil mantención), mejoró la refrigeración gracias a lamas activas en el frente, uff... en fin, esto se traduce en una aceleración de 0 a 100 de 3,4 a 3,5 segundos según si usas el Carrera 4S o el Carrera S, ambos con paquete Sport Chrono. Y eso considerando que sus pesos van entre 1.515 y 1.565 kilos respectivamente.
Al sentarnos en el interior nos encontramos con una consola de corte minimalista y tres pantallas. Dos de ellas, de 7", flanquean al tacómetro análogo y son dos porque ambas emulan dos esferas, para un total de cinco "relojes", como en todos los 911. La otra pantalla, de 10,9 pulgadas, lleva una nueva generación del Porsche Communication Management, que no es otra cosa más que el sistema multimedia y soporte completo del auto. Nos gustan los nuevos switches físicos (algunos de ellos, personalizables) y la nueva palanca de cambios, que más bien es un switch grande. Lo único que desapareció fueron los posavasos. Esperemos que eso no sea determinante a la hora de decidirte por un 911.
Y eso no es todo...
Como primicia mundial, Porsche ha desarrollado un modo Wet que es parte del equipamiento de serie. Esta función detecta superficies mojadas (gracias a unos micrófonos que pueden identificar el ruido del agua), adapta los sistemas de control a esas condiciones y alerta al conductor, que puede poner a punto el vehículo haciendo énfasis en la seguridad con sólo pulsar un botón o utilizando el selector de modos del volante (si lleva el paquete Sport Chrono). El sistema de aviso y asistencia de frenado, que también es de serie, detecta el riesgo de colisión con objetos en movimiento e inicia una frenada de emergencia si es necesario. El Asistente de Visión Nocturna con cámara de imagen térmica es una opción que está disponible por primera vez en el 911. El control de crucero adaptativo, también opcional, incluye el control de distancia automático, la función de parada y arranque, la protección para ocupantes y una innovadora función autónoma de Asistente de Emergencia.
El nuevo 911 Carrera S tiene un precio de entrada en Chile de 159.900 dólares, mientras que el Porsche Carrera 4S de comienza en 169.000. Por el modelo Cabrio, habrá que esperar un poco más.