Vende tu auto
Autos clásicos

Estos prototipos son la historia del Corvette C8

Estos proyectos conceptuales de General Motors son los ancestros del nuevo Chevrolet Corvette 2020.

Estos prototipos son la historia del Corvette C8

Después de décadas de ensayos y analizar si era viable desarrollar un Corvette con motor central, por fin, General Motors se animó a crear un auto de este tipo con el Chevrolet Corvette Stingray 2020.

En total, fueron 60 años los que GM estuvo experimentado con vehículos que tuvieran un motor impuesto en el centro del cuerpo. Dentro de esta lista de conceptos, que formaron parte del Chevrolet Experimental Research Vehicles (CERV) destacan el CERV I,II y III, así como el Aerovette.

Antes de conocer a detalle a estos prototipos de General Motors, específicamente aquellos que disponen de un motor central, es bueno apreciar las ventajas que conlleva que un vehículo coloque el bloque al centro del auto, justo detrás de los asientos.

Ventajas de un motor central

Un automóvil de motor central tiene varias ventajas que pueden ayudar en la estabilidad y en su rendimiento dinámico. Esto es gracias a que el motor está ubicado aproximadamente a medio camino entre los ejes delantero y trasero o entre el asiento del conductor y el eje trasero.

El asunto de la estabilidad se debe a que esta posición del motor ayuda a garantizar que el peso del automóvil se distribuya más eficientemente. Al colocar el componente más pesado del vehículo, el motor, lo más cerca posible de su centro, o un poco por detrás de él, se logran reparticiones de peso aproximadas entre 50:50 y 40:60 en el eje delantero y trasero respectivamente.

Con esa distribución de masa se pone más peso sobre los neumáticos traseros, con lo que se consigue mayor tracción en el eje posterior, además de que ayuda a disminuir la transferencia del peso hacia el eje delantero durante las frenadas para balancear la frenada y evitar bloqueos de ruedas.

Todo esto en conjunto permite que los automóviles con motor central ofrecezan una experiencia de conducción superior, sobre todo cuando se les exige rodar a altas velocidades en caminos con curvas, ya que pueden mantener su rapidez en curvas con menor subviraje y sobreviraje.

Además de lo anterior, el diseño de motor central en un automóvil permite una conducción mucho más suave por una mejor distribución del peso sobre cada rueda, de modo que la suspensión es más efectiva para absorber los golpes e imperfecciones del camino.

Con esto apuntado, seguimos con los Chevrolet Experimental Research Vehicles (CERV)...

CERV I

Este prototipo con una carrocería al más puro estilo de un auto de carreras, fue desarrollado en 1960 por Zora Arkus-Duntov, considerado el padre de Corvette, y se trató del primer proyecto de Chevrolet Experimental Research Vehicles.

Estaba equipado con siete combinaciones diferentes de motores en su vida útil de trabajo, pero su motor original, un Chevrolet V8 permitió que el concepto superara los 300 km/h. Por lo que se dice, este auto construido con aluminio, magnesio y fibra de vidrio, también sirvió para desarrollar numerosos elementos del Corvette Sting Ray de 1963, como la suspensión independiente estrenada en la segunda generación.

CERV II

En 1964, el equipo de Duntov se encargó de crear otro prototipo: el CERV II. Con convertidores de torque en la parte delantera y trasera, este concepto empleó el primer motor central con sistema de tracción en las cuatro ruedas, para el cual Duntov tenía la patente.

De igual manera, el CERV II fue el laboratorio sobre ruedas en el que Chevrolet desarrolló el espectacular bloque V8 427 ZL1 en 1970, un motor destinado a los autos de carreras con una potencia superior a los 500 hp. Más tarde, este ocho cilindros de 7.0 litros sería equipado en las versiones ZL1 del Camaro y Corvette.

Finalmente, al igual que sucedió con el CERV I, el CERV II fue regalado por General Motors al Museo Briggs Cunningham en California, el mismo que cerró sus puertas en 1986.

 

CERV III

Otro de los experimentos de General Motors de crear un automóvil con motor central es este CERV III presentado en 1990. Desarrollado con Lotus, este prototipo es más un vehículo para uso diario que la pista, como sucedió con el CERV I y CERV II. En este caso, este auto con diseño futurista para su época equipaba un V8 twin-turbo de 5.7 litros productor de 650 hp y 888 Nm de torque.

Este motor combinado con la carrocería y chasis hechos de hecho de fibra de carbono, kevlar y aluminio permitía al CERV III alcanzar una velocidad máxima de 362 km/h.

Aerovette

Otro de los prototipos con motor central que desarrolló General Motros fue el Aerovette. Denominado como Experimental Project 882 (XP-882), este concepto fue creado en 1969 por Zora Arkus-Duntov, pero John DeLorean, el gerente general de Chevrolet, canceló el programa porque era poco práctico y muy costoso.

Sin embargo, cuando Ford anunció sus planes de vender el DeTomaso Pantera a través de los concesionarios Lincoln-Mercury, DeLorean ordenó que se sacara de una bodega uno de los dos XP-882 construidos para exhibirlo en el Auto Show de New York de 1970. En 1972, DeLorean autorizó el trabajo adicional en el chasis XP-882 y le dio un nuevo código al proyecto: XP-895.

Con una carrocería casi idéntica en aleación de aluminio, esta segunda etapa del proyecto, el vehículo recibió un motor Wankel de cuatro rotores que liberaba 420 hp. En 1976, este motor fue reemplazado por un Chevrolet V8 de 6.6 litros. Posteriormente, este concept car fue nombrado Aerovette y aprobado para producción en 1980.

2020 Corvette: History | Chevrolet

Luis Hernández recomienda