Aunque no lo creas, la lucha por hacer de la penetración de los autos eléctricos algo mucho más viable desde el punto de vista de su usabilidad y conveniencia, no ha estado tan solo en las fronteras de los desarrolladores de baterías o químicos, o en la de los mismos fabricantes. Buena parte del desarrollo de carga está en los estándares usados para permitir alimentar las baterías. No por nada, con el correr del tiempo, muchas marcas han desarrollado supercargadores o se han afiliado a distintos protocolos.
De seguro, esta "guerra de protocolos" tendrá un final muy parecido al que han tenido los conectores en los computadores. Pasamos de distintos puertos y cables al USB y de seguro con los autos eléctricos pasará de manera idéntica.
En el caso de la Asociación CHAdeMO (Japón/China), se acaba de liberar su nuevo protocolo 3.0, el cual tiene bastantes ventajas versus los sistemas CHAdeMO 2.0 y también lo pone como un importante rival ante los protocolos CCS (EE.UU/Europa).
Lo primero que ha sido revisado es el conector, ahora mucho más pequeño y menos aparatoso que la pieza anterior, que tenía bastante en común con la pistola de recarga de una bencinera. El enchufe es el mismo, pero la miniaturización de su diseño permitirá ventajas en el diseño de los autos o las estaciones de carga.
CHAdeMO 3.0 permitirá cargar autos utilizando una potencia máxima de hasta 500 kW, con una intensidad de 600 A. Esto significa que el cable debe estar refrigerado por líquido, puesto que uno de los grandes problemas que tienen todos los sistemas eléctricos es la generación de altas temperaturas. En síntesis, si tenemos un auto que tenga cerca de 400 kilómetros de autonomía, podría eventualmente cargarse en 10 minutos. Usualmente el tiempo de carga en una electrolinera es de 45 minutos para el 80% de la autonomía y eso que no todos los autos alcanzan los 400 kilómetros.
Este estándar es compatible con el sistema CHAdeMO anterior, así como con la variante china GB/T y eventualmente con los protocolos CCS2. Incluso los cargadores de Tesla podrían usarlo, aunque por medio de un adaptador.
Aunque CCS tiene la ventaja de poder utilizar tanto corriente continua como alterna, la gran ventaja de CHAdeMO sigue siendo que es el único protocolo capaz de soportar bidireccionalidad. Para explicarlo de manera sencilla, si se corta la luz en tu casa, podrías usar tu auto como un generador o incluso pasar energia a otro auto. Esto es fundamental en los prototipos y planes de integración sustentables donde el auto eléctrico también puede proveer de electricidad a la red.
Con esto, CHAdeMO busca reposicionarse sobre el estándar CCS que ha estado quitándole posicionamiento al estándar CHAdeMO más viejo. Según informa Híbridos y Eléctricos, el estándar CHAdeMO y su símil chino GB/T suman más del 90% de la infraestructura global de recarga rápida, lo que habla del potencial que podría tener este nuevo desarrollo.