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Joey Logano se queda con el histórico regreso de la NASCAR Cup Series a un circuito de tierra

Tal como en los viejos tiempos, tras más de 50 años sin pisar un circuito de tierra, la Cup Series de NASCAR se animó a volver a este formato con el circuito de Bristol.

Joey Logano se queda con el histórico regreso de la NASCAR Cup Series a un circuito de tierra

El circuito de Bristol, en Tennessee, se fabricó en 1960 y en 1961 ofreció su primera carrera. Pese a ser un circuito chico, es uno de los más queridos y emocionantes por sus fuertes peraltes y esa sensación de estar en sentado en un estadio, por lo corto del óvalo.

Sin embargo, este año, Bristol fue sede de algo bastante interesante en el mundo de NASCAR, que fue hacer que los autos que compiten en la Cup Series, vuelvan nuevamente a girar en un circuito de tierra, como se hacía en tiempos antiguos. De hecho, la última vez que la Cup Series pisó la tierra, fue en 1970, en el circuito de Raileigh, carrera ganada por el mismísimo Richard Petty.

Circuitos con tierra, se han hecho antes de Bristol, pero esta es la primera vez que se piensa como parte integral de un campeonato. Se escogió Bristol porque el circuito había sufrido algunas bajas en popularidad, culpa de que siempre le tocaban fechas con problemas climáticos y que echaban a perder el show, así que fueron los primeros en ofrecerse para el experimento.

El equipo del circuito volcó 2.300 camionadas de arcilla roja en el circuito. Incluso Goodyear fabricó un neumático especial para esta competencia, con diseño y soporte asimétrico (porque los autos giran en un solo sentido) y con grandes calugas para poder evacuar la tierra y tener mayor tracción. ¿Qué podría salir mal?

Lo que casi salió mal

La Cup Series no fue la única que corrió ese día en Bristol, sino que todas las otras categorías, incluyendo las camionetas y los stock cars de categorías menores y los problema comenzaron a surgir el viernes de prácticas:

  • Después de cuatro tandas de pruebas, la arcilla, el peso de los autos y la alta velocidad comprometieron los neumáticos, los cuales se comenzaron a deshacer. Además se estaban generando surcos en la arcilla, lo que en tiempos pasados probablemente no era mayor problema, porque los circuitos eran completamente de tierra (más compactada) y porque los autos tenían más despeje. Aquí se estaban enterrando y perdiendo el control.
  • Hubo lluvia el sábado, lo que hizo imposible la visibilidad en los parabrisas de los autos. Al final se corrieron las tandas para cuando todo estuviese más seco y se suspendieron algunas rondas precarrera.
  • Finalmente la carrera se efectuó con tandas más largas, se autorizaron dos tandas de precaución para que los equipos tengan más chance de ajustar sus autos y la organización pueda revisar el circuito, y finalmente se autorizó a usar un set extra de neumáticos.

La carrera

Con polvo, harto golpe y mucha velocidad, se puede decir que la carrera de Bristol fue todo un éxito y que se mantendrá en el calendario para el próximo año.

Finalmente el triunfo quedó para el piloto de Penske, Joey Logano, quien lideró las últimas 61 vueltas con el asedio de Denny Hamlin, una bandera amarilla tardía y una precaución de competencia.

Hamlin no pudo seguirle el ritmo a Logano, perdiendo agarre y cediéndole espacio a Ricky Stenhouse Jr. quien estuvo muy cerca de quitarle la punta a Logano.

Logano es el séptimo ganador en lo que va de la categoría. Todas las carreras han tenido a un ganador diferente, lo que está haciendo muy competitiva la temporada del 2021.

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