En octubre pasado, Mercedes-Benz mostró a algunos periodistas un curioso teaser acerca de un prototipo llamado Vision EQXX, un conceptual que encabeza la nueva estrategia de la marca alemana, que como sabemos, apunta a ser una compañía 100% de autos eléctricos hacia el 2030. Tal como todos los conceptos de Mercedes-Benz que llevan el nombre Vision, es un prototipo de desarrollo que introducirá nuevas tecnologías.
Los de Stuttgart le encomendaron una misión a su división de propulsores de alto performance, los mismos que están a cargo del tren motriz del monoplaza de Hamilton y Bottas en la F1, para que experimenten y les saquen el máximo rendimiento a sus futuros motores eléctricos, pero al parecer aún no han tenido mucho éxito. De hecho, Mercedes había prometido que el EQXX iba a ser capaz de recorrer 754 millas (más de 1.200 kilómetros), que es la distancia que separa a Beijing de Shanghái, pero no ha pasado nada y quizás es por lo mismo que del EQXX no se ha sabido nada más... hasta esta semana.
No seamos injustos, con las bajas de los salones y la pandemia del Coronavirus, de seguro Mercedes también tuvo que preocuparse de otras cosas, pero el EQXX volvió a aparecer nuevamente en la presentación de los planes de Mercedes Benz, con la misma premisa intacta: lograr una autonomía superior a los 1.000 kilómetros y un performance de un digito en la tasa de kWh por 100 kilómetros. Y más encima, le pusieron fecha: a principios del 2022.
Lo poco que deja ver el teaser, revela un frontal muy parecido al del AMG One, con una franja LED que recorre el frontal. El capó también lleva dos aperturas y en la punta, se logra ver la estrella de Mercedes-Benz, plana.
¿A quién apunta Mercedes? ¿Tesla? ¿Lucid? ¿Porsche? Queda harto aun para conocer más de sus secretos.
