Decir que al Mustang Shelby GT500 le falta potencia es absurdo, con 760 hp extraídos de un V8 de 5.2 litros, representa el punto de evolución máxima de los muscle cars. No solo es rapidísimo en rectas, el GT500 también lo es en un circuito y es capaz de seguir el ritmo a los deportivos más acreditados del mundo.
Sin embargo, la potencia nunca es suficiente y eso es particularmente más cierto con los muscle cars, siempre hay quienes quieren más caballos y alguien dispuesto a encontrar la forma de conseguirlos.
Código Rojo: esto es lo que pasa cuando cambiamos un supercargador por dos turbocompresores
Shelby American ha anunciado la creación de un paquete de modificaciones para el GT500 denominado Code Red que se caracteriza principalmente por su descomunal potencia de hasta 1.300 hp.
Para lograr tales niveles de potencia, el supercargador es reemplazado por un sistema twin turbo, headers de acero inoxidable, downpipe de 76 mm, nuevos pistones y bielas, cadena de tiempo de alto rendimiento, sistema de inyección mejorado y un sistema de gestión provisto por MoTec. El resultado es una potencia de 1.000 hp y 1.062 Nm de torque cuando se utiliza gasolina de 93 octanos, mientras que, cuando se emplea etanol E85, la potencia se incrementa hasta los 1.300 hp y 1.356 Nm de torque.
La suspensión recibe unos resortes ajustables y amortiguadores magneride con un setting más firme.
Para que el audio haga match con el video, Shelby American ha creado un kit de carrocería de fibra de carbono que incluye: capot, splitter frontal, alerón y difusor trasero así como pasos de rueda más anchos y llantas de aluminio forjado. Por su parte, en el interior hay tapiz de cuero, placa conmemorativa en el tablero y nuevas alfombras. Si el GT500 es de año modelo 2022, también llevará una placa conmemorativa por el 60 aniversario de Shelby.
El costo de esta conversión es de $209.995 dólares sin considerar el auto a transformar, y se puede aplicar a cualquier GT500 de año modelo 2020 a la fecha. Adicionalmente, Shelby conservará las piezas extraídas del modelo donante y por si fuera poco, la conversión no está pensada para uso en autopistas, además de que cualquier garantía de fábrica evidentemente se pierde. Tu sabrás en lo que te metes, pero por lo mismo, el Code Red será una verdadera amenaza cuando lo veas venir en tu retrovisor.