Si hay una marca que se ha esforzado por renovar toda su oferta de SUVs, ha sido Honda, quienes en un año lanzaron todas las nuevas generaciones de sus productos utilitarios, como el HR-V, el CR-V y también Pilot. Sin embargo, hay un modelo nuevo que también se suma a esta familia y que no había estado presente antes, como es el ZR-V.
Este modelo emerge con el cambio que ha existido en las categorías automotrices, donde el segmento C comienza a abrirse para dar espacio a dos formatos, uno más grande como el CR-V y otro más juvenil y menos tradicional como es este ZR-V. Otras marcas también han hecho lo mismo como Toyota con el RAV4 y el Corolla Cross, Volkswagen con el Taos y el Tiguan o Kia con el Seltos y el Sportage.
El ZR-V se vende en Estados Unidos como HR-V, porque allá les gustan más los SUV grandes. Por lo mismo, notarán algunos detalles heredados del HR-V anterior.
Honda ZR-V: dimensiones y diseño
- Largo: 4.568 mm
- Ancho: 1.840 mm
- Alto: 1.620 mm
- Distancia entre ejes: 2.655 mm
- Maletero: 389 litros
- Despeje: 170 mm
Mientras el HR-V está en los 4,3 metros y el CR-V se acerca a los 4,7, el ZR-V queda justo en la mitad. Aunque es más grande que un Corolla Cross, pierde con este en capacidad de carga (440 litros) culpa de una silueta algo más deportiva. El Haval Jolion también está parecido al Corolla Cross en dimensiones y capacidad. El Kia Seltos, sorprendentemente está tímidamente bajo los 4,4 metros, pero con un muy buen maletero y con un diseño que lo acerca más a este segmento que al HR-V.
Sin embargo, los 389 litros del ZR-V no son despreciables y para muchos estará más que suficiente. Eso sí, su poca capacidad se explica por su vocación urbana: ni tiene barras en el techo.
De diseño, es un modelo muy anodino y cuyos mayores atractivos están en la zaga con las luces LED en forma de "cucharón" y en el frente con una máscara única que no es compartida con el lenguaje de diseño de ningún modelo actual de Honda: solo una abertura central, el logo en la parte superior y los focos en una posición tradicional. La trompa ligeramente encuñada, el escape real (y metalizado) en la cola y la liviana caída de la luneta trasera apelan a un "saborcillo" deportivo, pero no es un auto llamativo: incluso podríamos decir que es algo soso con respecto al trabajo de muchos otros fabricantes en este segmento.
Honda ZR-V: interior
Como la base del ZR-V es la misma que la del CR-V, obvio que hay algunas cosas en común, que por supuesto, son tomadas prestadas del Civic. Y tal como en el CR-V, esto no solo representa un cambio ergonómico, sino que una posición de manejo más cercana a la de un auto.
Sin embargo, es destacable que la calidad percibida del ZR-V sea más alta que la del CR-V y por supuesto que mucho mejor que la del HR-V. Esto se nota en las superficies tapizadas de cuero, sea el tablero principal, los apoyabrazos en las puertas y algo que vuelve del HR-V anterior y que nos extraña que no haya sido incorporado en el "verdadero HR-V" como es la consola central curvilínea con la palanca de cambios. Esta es muy atractiva y además cuenta con espacios portaobjetos y puertos USB de fácil acceso. Si le sumamos los aireadores alargados con diseño de panal y el elegante comando para la climatización, nos resulta un auto muy bien acabado, fácil de usar y relativamente moderno. Lo único criticable es que la consola central mencionada no está muy firme y que las puertas si se sienten algo ligeras.
Por dentro se delata la influencia directa del Civic y su galardonado interior. Esto no solo significa un cambio en la ergonomía, sino que también en la posición de manejo, que es mucho más cercana a la de un auto.
Igual que con el CR-V, el cuadro de instrumentos podría ser más moderno y llamativo. Cuenta con una pantalla digital que hace de tacómetro y computador a bordo, al lado de un velocímetro analógico. Te entrega toda la información del auto de manera clara e intuitiva, pero un poco de modernidad, no estaría de más.
Lo mismo el sistema multimedia, de 9”, con CarPlay inalámbrico, botones físicos y varios puertos USB, con una interfaz sobria, pero muy funcional, con iconos grandes y legibles, perfectos para no distraerse y para personas que no son muy tech. Es el mismo sistema empleado en CR-V.
Con respecto a las plazas de atrás, al no haber apoyabrazos, el respaldo central es cómodo, pero como los asientos de los costados son más abutacados, se penaliza el uso: es más para cuatro que para cinco, aunque con buena reclinación y amplitud. Atrás hay salidas de aire independientes y puertos de carga USB.
El equipamiento es muy bueno, el problema es que por el precio que se paga hay cosas que uno comienza a exigir, como el clúster digital, audio premium, asientos eléctricos y climatizados en ambas plazas delanteras, un verdadero techo panorámico, llantas más grandes, etc. Por fortuna, todo lo que tiene que ver con seguridad esta 100% cubierto, desde 8 airbags (los "dos" menos comunes son de rodilla para las plazas delanteras) y un buen paquete de asistencias a la conducción. Los sensores de punto ciego son reemplazados por la cámara Lanewatch de Honda, que muestra el ángulo que más cuesta mirar desde el conductor. El único problema es que la cámara tiene una resolución similar al de una webcam de los años 2000.
Honda ZR-V: motor y manejo
Un punto mejorable que tiene el ZR-V es su opción de motor. Hablamos de un 2.0 DOHC I-VTEC con 155 Hp y 185 Nm de torque. Se asocia exclusivamente a una transmisión CVT con tres modos de manejo: Sport, seleccionable desde la caja de cambios y "Econ" que es el clásico modo de Honda más ecológico. Se agradece que Honda no haya hecho el modo Econ tan restrictivo, lo que lo hace perfecto para andar en ciudad de manera cómoda y gastando lo justo. El modo Sport de la caja de cambios hace más agresivo el comportamiento, con más revoluciones y marchas que a veces se definen bien y otras veces no tanto: no convence mucho.
Sobre los consumos, es un auto que quizás se percibe un tanto gastador, pero al final está dentro del consumo normal que puede tener un motor de dos litros con esta potencia. En modo Econ si se pueden llegar a los 9,8 km/l que da el 3CV o más. Lo bueno es que es un consumo gestionable, no es un auto que se desbande y eso es gracias a el sistema I-VTEC que ayuda a que el motor sea eficiente si se conduce como tal.
Nuestro Editor en Jefe, Marcelo Palomino, se anticipó al ZR-V en México, aunque probándolo sobre 2.600 metros de altura, lo que compromete la entrega del motor para cualquier auto. Sin embargo, su apreciación fue muy similar a la mía, en el sentido de que es un motor adecuado y suficiente para el uso que se le va a dar, con buen torque en baja revolución y con una caja CVT que no se lleva toda la fuerza del auto.
Sin embargo, hay algo que encanta en el ZR-V, que es su chasis, su andar, el aplomo que entrega. Es un modelo que como han dicho varios colegas, se siente "más auto" en el sentido que ofrece la conducción de un modelo de mayor gama, cómodo, con buen recorrido de suspensión sin ser un flan, con movimientos naturales en curvas y ahí va nuestro reparo con el motor aspirado: un motor 1.5 Turbo como el del CR-V lo haría brillar.
Honda ZR-V: resumen
De todos los Honda nuevos que he manejado, este sin dudas es el mejor creo yo. Me gustó su sensación madura de manejo, el excelente trabajo de chasis donde encuentras confort, grip y contención. También alabo la calidad percibida, lo fácil que es operar todo (esto lo hace ideal para personas mayores), el espacio general. Es un auto ejemplar, que sin ser el mejor del segmento o el más espacioso, podría ser un modelo muy competente y recomendable.
Pese a lo sobrio y a su motor aspirado, aquí hay un auto que tiene algo especial y que se desmarca un poquito de otros modelos que ofrece Honda hoy en día.
El gran problema de este auto es, como pasa con todos los modelos de Honda en Chile, un precio carísimo (32.5 millones esta versión) que lo deja completamente fuera de mercado y fuera de segmento. Es incomprable al lado de modelos de un segmento superior, como podría ser incluso un Toyota RAV4, en varios millones de pesos menos.