El primero de agosto de este año, 103 vecinos de una de las cuadras de un complejo de departamentos en Incheon, Corea del Sur, tuvieron que ser evacuados de riesgo. ¿La razón? En el subterráneo de uno de los edificios cercanos se ubicaba un punto de carga de Mercedes-Benz para autos eléctricos. Allí, un Mercedes-Benz EQE 350 que llevaba tres días estacionado sin cargarse, explotó de manera dramática. Esto dañó a 140 autos estacionados en el mismo subsuelo, 70 de ellos con siniestros graves. Además, 23 vecinos del mismo edificio tuvieron que ser hospitalizados de urgencia por inhalación de gases tóxicos. Los daños afectaron los suministros de agua y electricidad del edificio por cinco días después del incidente.
Noticias de autos eléctricos con explosiones en sus baterías por accidentes o sobrecargas no son nada nuevo. Usualmente las oímos desde Estados Unidos y asociadas a Tesla. No sabemos si lo hemos naturalizado o no, si tiene que ver con que todo explota en Estados Unidos o porque Tesla es una marca nueva, al lado de los casi 100 años que tiene Mercedes-Benz (desde que se llaman Mercedes-Benz); uno no juzga tan duramente a los novatos, por muy capos que sean en electromovilidad.
Sin embargo, no se le puede quitar relevancia a que las baterías en los autos eléctricos son un tema de riesgo: no explotan mucho, pero cuando lo hacen, las consecuencias son catastróficas y controlar sus daños no es como llegar y apagar el fuego con agua y ya.
Entonces, ¿por qué ahora la conversación sobre el tema ha perdurado?
Cuando el juego se hace verdadero...
Imagen: The Sun
Hyundai y Kia son empresas que han hecho incalculables esfuerzos en posicionar sus nuevos modelos eléctricos, al punto que han logrado posicionarse como lideres en la materia, con diseños de vanguardia, performance, tecnología y autonomía. Pero también tenemos que hablar de tres gigantes de las baterías, como son Samsung, SK On y LG. Esto significa que cualquier cosa que ocurra en Corea del Sur y que afecte la percepción que se pueda tener de los autos eléctricos afectará enormemente la economía del sector.
Lo segundo es la imagen de Mercedes-Benz, quienes han llegado tarde al mundo de los autos eléctricos avanzados, pero con el fin de hacer las cosas bien y al estándar que nos acostumbra la marca alemana: si se quema un Mercedes-Benz, que se puede esperar del resto. Desde el Nikkei Asia, se reporta que Mathias Vaitl, presidente y CEO de Mercedes-Benz Corea viajó al lugar de los hechos para conversar con los vecinos y también con diversos políticos sobre el tema. Incluso dicen que Mercedes-Benz ofreció una indemnización de $3.36 millones de dólares a los afectados de los 1.581 departamentos y hogares de la zona, cantidad que fue rechazada por ser un monto muy bajo y no considerar los problemas a largo plazo que esto generó.
Al menos, la marca alemana está colaborando en la investigación, revelando un dato importante que se espera, también repercuta en otras empresas automotrices: el proveedor de las baterías. Mercedes-Benz fabrica al EQE en Alemania y China. En Alemania, las baterías montadas son desarrolladas por CATL, mientas que en China, la producción del modelo está a cargo de BAIC y se utilizan las baterías de una empresa llamada Farasis Energy, de la cual Mercedes-Benz es accionista en un 3%. Se dice que el modelo incendiado, fue fabricado en China, según las pesquisas realizadas.
¿Qué es lo que se puede rescatar de este episodio?
Imagen: Reuters via CNA
Lo primero, antes que los autos, son los daños a las personas, sean materiales o sean de salud. Por lo mismo, esto significará que al menos en Corea del Sur se impulsarán medidas y protocolos más estrictos para evitar catástrofes como esta, más aún en lugares cerrados como este subterráneo, lugares que se aprovechan para colocar cargadores de autos en todo el mundo y que son de difícil acceso.
Lo segundo tiene que ver con la transparencia, o sea, instar a las marcas a que revelen quienes son sus proveedores. Y esto no con el fin de quitarle la culpa al fabricante de autos, pero para detectar posibles fallas en otros modelos y poner en alerta a sus clientes. Las baterías, insistimos, es el elemento más crítico de un auto eléctrico y está sujeto a cambios de temperatura y flujos de alto voltaje. Una batería duradera y robusta puede ser una garantía absoluta de fiabilidad y un vector para impulsar a otros fabricantes a seguir innovando en esta área: ¿Por qué creen que BYD habla tanto de sus baterías Blade?
Y lo último, saber darse cuenta que la ingeniería tras el vehículo a combustión lleva años y años en perfeccionamiento, mientras que los autos eléctricos de producción masiva son recientes en nuestra historia y llegan en tiempos donde los vehículos parecen ser un poco más desechables que antes. Hace no muchas horas, más de 50 Rivian se incendiaron en la fábrica de Illinois, sin causas claras aun. No queremos ponernos alarmistas, pero si aún no estás seguro de manejar un auto eléctrico, sea por autonomía, precio o por historias como esta, aun puedes comprar un auto híbrido o uno más ecológico, porque alternativas hay.
Por ahora habrá que ver que ocurre con la demanda de eléctricos en Corea, donde el 2% del parque automotriz es eléctrico, al igual que el 14% de los taxis. Según la empresa K Car destinada a la venta de autos usados, las publicaciones de autos eléctricos han subido en un 184% y no se estan vendiendo.