Mientras que el Grupo Volkswagen tiene finanzas sanas y se permiten invertir billones de dólares en marcas como Rivian, o preparar nuevos productos sumamente emocionantes para Porsche, Audi y Cupra, la propia Volkswagen como marca está pasando por un momento difícil, pues el propio director de finanzas de la marca ha declarado que tiene uno o dos años para salvar a la marca.
Esto sucedió solo unos días, tras las celebraciones del 50 aniversario del Volkswagen Golf. En una reunión interna, Arno Antlitz, jefe de finanzas de la marca, confirmó que solo le quedan uno o dos años para mejorar sus ventas, pues hasta la fecha no han logrado recuperar el nivel que tenían antes de la pandemia del Covid-19.
Lo anterior significa que sus ventas están 500.000 unidades anuales por debajo de lo que deberían tener para ser rentables. La causa de esa baja se centra, según los reportes de Reuters, en la caída en ventas en Europa, la falta de interés del público en los autos eléctricos y la enorme competencia que VW enfrenta en China, donde las marcas locales tienen una ventaja inmensa en cuanto a precios por los subsidios que reciben para crear más autos eléctricos y ofrecerlos a un mejor precio.
Desde Europa se dice que Volkswagen podría cerrar dos plantas, una sería de ensamblaje y otra de autopartes. Finalmente, el propio CEO de la marca Volkswagen, Oliver Blume, dijo que “juntos implementaremos las medidas apropiadas para ser más rentables. Regresaremos a VW al lugar al que pertenece, esa es una responsabilidad de todos nosotros”.