Pontiac fue cerrada por General Motors en 2010. Y aunque ya tiene varios años fuera de circulación, sigue siendo una marca con muchos fans e historias por contar. De hecho, ahora toca el turno de recordar un concepto que bien podría ser estrella en una película de Tim Burton.
El que tienes frente a tu pantalla es el Pontiac Phantom de 1977, el cual es fruto de la mente creativa del diseñador Bill Mitchell, uno de los diseñadores más influyentes en la historia de General Motors.
De hecho, este auto fue el último creado por Bill Mitchell, quien dejó su huella en muchos proyectos de GM, incluyendo autos como el Cadillac Sixty Special de 1938, el Chevrolet Bel Air de entre 1955-1957, el Buick Riviera de los sesenta, algunas generaciones del Cadillac DeVille y Seville, además del famoso Corvette Stingray de 1961.
Presentado en 1977, el Phantom tiene formas que no estarían fuera de lugar en un "batimovil", en especial la larga trompa, los focos horizontales con cubiertas al ras del capot y elementos cromados menores e instalados en linea con la carrocería. En el costado resaltan los fuertes hombros traseros y su afilada silueta, sin contar las ventanas aerodinámicas, al estilo del Lamborghini Countach o el Delorean.
Por cierto, la carrocería estaba construida en fibra de vidrio y el chasis fue tomado prestado del Pontiac Grand Prix. La teoría nos diría que bajo el cofre deberíamos encontrar un enorme V8, sin embargo, lamentablemente se trataba de una maqueta, ya que no había ningún propulsor.
Este auto no se fabricó, pero sí influyó el estilo que adoptó Pontiac en los años subsecuentes. Por cierto, si alguna vez quisieras ver este auto en vivo, debes saber que se encuentra exhibido en la colección del Museo Sloan en Flint, Michigan.
