El mes pasado, Karma Automotive develó la tercera generación del conocido Karma Revero, que más que una tercera generación es simplemente una evolución sobre el mismo Revera que conocimos en Chile y también en otros lados.
Por sobre el Revero, ahora se encuentra el Invictus, que es técnicamente el mismo Revero, pero con algunas mejoras que lo hacen más exclusivo.
Por ejemplo, el Invictus equipa mucha fibra de carbono, la que podemos ver en el capot, el techo, los paneles laterales, la tapa del maletero, el alerón, los pasos de rueda, la parrilla, los faldones, el difusor trasero, en fin, todo el auto completo. Lo más curioso es el trabajo de pintura en degradé, que deja ver un poco de la fibra en ciertas zonas
Para mejorar el rendimiento del modelo anterior, la otrora compañía estadounidense lo dotó con amortiguadores helicoidales Öhlins y mejoras en la dirección por lo que ahora es más directa y predecible en curvas difíciles.
El interior cuenta con líneas de costura que van desde la parte delantera hasta la trasera del habitáculo y cojines de los asientos especiales. Además, los patrones hacen referencia a edificios emblemáticos como el Chrysler Building de Nueva York.
Mecánicamente, el Karma Invictus, debemos recordar que se trata de un auto eléctrico de rango extendido (EREV). Eso significa que cuenta con dos motores eléctricos y un motor 1.5 Turbo de origen BMW, además de un pack de baterías de 28 kWh, con lo que logra una potencia combinada de 536 Hp y 745 Nm de torque máximo, con una autonomía en modo eléctrico de 129 kilómetros.
Gracias a las llantas de 21" con neumáticos Michelin Pilot Sport 4S y la dieta de fibra de carbono, el tiempo de 0 a 96 km/h lo logra en 3,97 segundos, versus los 4,5 del modelo estándar.
Hasta el momento, Karma Automotive no ha publicado información sobre los precios ni periodos de entrega. Lo que sí sabemos es que se fabricarán 30 unidades del Karma Invictus.