
A inicios de marzo y en el marco del Carnaval de Río, Volkswagen presentó en sociedad al que considera puede ser un nuevo ícono dentro de su larga y prolífica historia en Sudamérica: el Tera, un crossover subcompacto que por dimensiones y precios se ubicará por encima del Polo y por debajo del Nivus, y que llegará al mercado chileno en septiembre próximo, ya como modelo 2026.
Inicialmente denominado Proyecto A00, el Tera busca reemplazar el posicionamiento e impacto comercial que tuvo el Volkswagen Gol, un modelo descontinuado en 2023 tras cuatro décadas de historia. Pensado, diseñado y desarrollado desde cero en Brasil utilizando las más nuevas tecnologías de la marca, el Tera busca recuperar el espíritu popular y regional que tuvo el Gol y, antes que él, el afamado Escarabajo.
Y de paso, el Tera debería permitir que Volkswagen llegue al primer lugar en ventas en la región, una promesa realizada por Alexander Seitz, CEO de la marca en Sudamérica. El ejecutivo alemán resaltó durante el lanzamiento regional del modelo celebrado en Cartagena de Indias (Colombia), que gracias a un plan de inversiones de 3.500 millones de dólares hasta 2028 y la nueva estrategia de productos que incluye 17 nuevos modelos, la marca ha recuperado ventas y market share, alcanzando el segundo lugar en 2024.
"No sé si llegaremos este año o el próximo, pero con Tera seguro que estaremos pronto en ese primer lugar", dijo.
Volkswagen Tera: características principales
El Tera es un modelo basado en la plataforma MQB-A0, la misma que da vida al Polo, Nivus, Virtus y T-Cross. La marca indica que esta base fue modificada (de ahí el nombre A00) para, suponemos, poder alcanzar los objetivos de precio. Eso sí, no se afectó en nada su seguridad, ya que el modelo acaba de alcanzar 5 estrellas Latin NCAP.
Como los crossovers son la moda, era lógico que el Tera tomara este formato, pero en un tamaño más compacto, como si fuera un hatchback levantado. Mide 4.151 mm de largo, 1.777 mm de ancho, 1.504 mm de alto y tiene 2.566 mm entre ejes, con un despeje al piso de 178 mm y un maletero con 350 litros de volumen (VDA). Si lo comparamos con sus hermanos, es casi idéntico en dimensiones al Polo (7 cm más largo y 2 cm más ancho) y apenas más pequeño que el T-Cross (7 cm más corto).
Y al mantener la base MQB-A0, el Tera ofrece el mismo paquete mecánico conocido en los modelos regionales de la marca: suspensión delantera independiente McPherson, suspensión trasera de barra de torsión, frenos de disco en las cuatro ruedas (ventilados adelante y sólidos atrás), y dirección de piñon y cremallera con asistencia eléctrica.
El peso también es distinto, de 1.112 y 1.162 kilos, dependiendo del tren motriz. Esto es alrededor de 50 kilos más que un Polo y unos 80 kilos menos que un T-Cross de entrada.
El diseño del nuevo Tera estuvo a cargo de José Carlos Pavone, y refleja todos los elementos más identitarios de los modelos más recientes de Volkswagen. Hay paneles más suavizados, pasos de rueda un poco más abombados y algunos elementos distintivos de diseño, como las llantas bitono, la trama de la parrilla, la firma luminosa LED con dos segmentos en el frente o los focos "click-clack" en la zaga, los que cambian de diseño cuando se iluminan. Por supuesto, también están los elementos típicos de crossover, como las guarniciones plásticas, las barras en el techo y ese tipo de cosas.
Es un auto muy atractivo y proporcionado, lo que le ayudará a popularizarse en los mercados donde va a llegar. La línea del techo está un poco más caída, pero no como en un "SUV-tipo-coupé" (el nivus), sino que más como lo que encontraríamos en un hatchback europeo, lo que sumado a su robusto pilar C y un marcado guardabarros trasero, le confiere una presencia más deportiva.
Todas las versiones se podrán elegir en seis tonos diferentes, dos de ellos sólidos (Negro y Blanco), y cuatro opciones de colores metalizados: Rojo, Plata, Gris Platino y Azul. La versión Outfit ofrece la combinación de carrocería bitono con techo negro.
Quizás si la mayor sorpresa (positiva) del Tera está en el interior, donde uno podría esperar una calidad tosca al estilo Mercosur, más aún considerando que es un modelo de entrada. Sin embargo, la calidad percibida del Tera es muy buena, podríamos decir alta considerando su posicionamiento, muy al estuilo Volkswagen.
Sí, hay una mezcla entre plásticos suaves y texturados con otros un poco más espartanos, pero son los detalles, como el tapiz sintético con relieve, las texturas y efectos de las puertas o el grano del plástico los que terminan de convencer.
La ergonomía es tan buena como la de cualquier auto de la plataforma MQB-A0, pero con un tablero mucho más esculpido. Todos los mandos están al alcance de la mano, el volante es el mismo que conocemos de los hermanos más grandes del Tera y los asientos son cómodos para manejar por muchas horas. Incluso la habitabilidad, que es la mayor duda en un auto tan pequeño, es sobresaliente en las plazas traseras, tanto en altura, como en espacio para las piernas, y en el confort del asiento mismo.
Volkswagen Tera: configuraciones de equipamiento
El Tera se ofrecerá en Chile con los paquetes de acabados Trendline, Comfortline y Highline, este último con opción de asociarse a un paquete estético de corte off-road llamado Outfit, que incluye elementos en negro como el techo, las llantas de 17", los espejos exteriores y asientos delanteros exclusivos en cuero blanco y negro con detalles en azul.
No tenemos una configuración exacta del paquete Trendline porque en Brasil no existe como tal, y los ejecutivos chilenos se quieren guardar algunas sorpresas para el lanzamiento en Chile. Pero en Brasil sí existe una versión llamada MPI, que asumimos corresponderá a nuestra Tendline.
Cuenta con sistema de infoentretenimiento VW Play de tipo flotante de 10,1 pulgadas, compatible con Apple CarPlay y Android Auto por vía inalámbrica, clúster digital de 8", faros full LED, seis airbags, frenada automática de emergencia, detector de fatiga, control de crucero, vidrios y espejos eléctricos, sensores de retroceso con cámara, entre otros. La duda está en las llantas, ya que en Brasil esta variante ofrece llantas de acero de 15" con tapa, pero la variante TSI que le sigue ya cuenta con llantas de 16".
Las versiones Comfortline conserva los elementos Trendline, pero suma seguridad con el control crucero adaptativo, y conveniencia con el reposabrazos para el conductor, un tapizado diferente en los asientos, cargador inalámbrico de teléfonos, llave de proximidad con botón de encendido, levas para cambios de marcha en el volante y una toma USB tipo C en la parte trasera.
La versión más cara del Tera es la Highline, que incluye llantas de aleación de 17", panel de instrumentos digital de 10,25", luces ambientales debajo del sistema multimedia, sensor de estacionamiento delantero, función "one-touch" en los cuatro vidrios eléctricos y guantera iluminada. El interior es oscuro con tapiz de cuero y tela.
Como ya dijimos, estos son las especificaciones en Brasil, por lo que podrían cambiar cuando el Volkswagen Tera pise suelo chileno.
Volkswagen Tera: motores e impresión de manejo
El Volkswagen Tera se ofrecerá con dos opciones mecánicas.
La primera es el conocido motor de cuatro cilindros MPI de 1.6 litros, que eroga 110 Hp de potencia y 155 Nm de par, acoplado a una caja manual de 5 velocidades. La segunda es el motor 1.0 TSI, un tricilíndrico turbo que como en Chile debe cumplir la norma de emisiones Euro 6C, ofrecerá 109 Hp (10 Hp más que en el resto de la región) y 170 Nm de par, y que estará gestionado por una caja automática de seis velocidades.
Su conducción no nos sorprende en absoluto, ya que desde hace décadas que el ADN de Volkswagen se plasma en la forma en que se manejan todos sus modelos, y podemos confirmar que el Tera es un auténtico Volkswagen. Y eso implica una dirección ligera y precisa, con mucha retroalimentación al conductor, lo que hace que llevarlo por las estrechas calles de Cartagena de Indias haya sido cosa de niños.
La suspensión tiene el clásico tarado de la marca, media firme, media suave, siempre de mucha calidad, para que el vehículo se sienta bien en todo tipo de superficies. El tacto sólido, pesado, aplomado de Volkswagen está presente en el Tera, y si podríamos esperar, quizás, una menor calidad de amortiguación, eso no ocurre. No hay rebotes desagradables en el tren trasero (que tiene un eje rígido), ni una trompa que quiera jugar por libre bailando de lado a lado. Hay aplomo y control garantizado.
Además hay una alta calidad en la aislación del habitáculo, que es donde suelen ahorrarse dólares. Al menos a velicidades normales no se escucha demasiado el ruido del viento ni de las ruedas, y del motor no hay ni registros. Lo único que sentimos fueron algunas asperezas es el paso de las juntas de las calles, pero bien podría haber sido el perfil del neumático o una mayor presión de aire.
Vamos al motor. Probamos una versión Comfortline con motor 1.0 TSI y caja automática. Buen motor, con algo de retardo en las salidas, pero con mucho empuje de las 1.500 rpm en adelante, suficiente para adelantar con confianza en carretera o ganar alguna pulseada desde un semáforo. No es un deportivo, claro, ni pretende serlo, pero no falta fuerza para el peso del auto.
Y además es eficiente. Volkswagen nos propuso un concurso para ver quien gastaba menos, y un auto rondó los 20 km/litro, aunque cuidando en exceso. Nosotros anduvimos a velocidades normales por las calles y carreteras de Cartagena, y entregamos con 16,2 km/litro, antes de que un colega decidiera ganar todas las salidas y lo bajó a 14,5. Nada mal en cualquier caso.
Volkswagen Tera: apuntes finales
De cumplirse lo anunciado en Colombia, el Volkswagen Tera desembarcará en Chile en septiembre próximo con cinco versiones y precios entre los 14,5 y los 17 millones de pesos, eso considerando los bonos tradicionales.
Son precios que posicionarían a cualquier modelo semejante como un favorito, pero para ello hay trabajo por hacer, como darlo a conocer y volver a meter a la marca en la mente de los consumidores, algo que se ha perdido con los años por diferentes razones.
Un Volkswagen es un auto apetecido por muchos, un referente mundial y una garantía de que detrás hay ingeniería alemana, durabilidad, seguridad y calidad garantizada, sin considerar extras como un alto precio de reventa. Y ahora, por fin, tiene un modelo atractivo para un segmento popular y en crecimiento, a un precio que compite de lleno con la industria china, que es el referente en este rango de precios.
El producto está, es bueno y competitivo en equipamiento y precio. Ahora debe llegar a la mente y a la preferencia de los consumidores.