
En el año del centenario de su modelo insgnia, el Phantom, Rolls-Royce trabaja a toda maquina ultimando detalles de lo que se espera sea una edición ultraexclusiva y limitada del modelo, la que sería de apenas 25 unidades de esta berlina que ya está en su octava generación y usará como base el conocido motor V12 biturbo de 6.7 litros, que la marca denomina como Colección Privada.
El nuevo modelo irá aún más lejos que el Cullinam Cosmos sobre el cual les informamos hace un tiempo atrás, por cuanto presentará un interior con detalles realmente únicos, con técnicas nunca antes usadas por los artesanos de la marca británica, entre las que se cuentan: marquetería 3D, capa de tinta 3D y pan de oro de 24 kilates.
El modelo contará con la carpintería más compleja usada en la historia de la marca, por cuanto el personal debió someterse a una capacitación especial de un año. De hecho el mismísimo Phil Fabre de la Grange, Director de Bespoke o departamento de personalización de Rolls-Royce afirmó: "Habiendo visto de primera mano los desafíos y las posibilidades con las técnicas de madera en Rolls-Royce, puedo decir con certeza que el Colectivo ha desbloqueado nuevas y notables posibilidades para Bespoke, un avance que fue posible gracias a su extraordinaria dedicación a la placa de identificación Phantom en su centenario”.
Detalles del suntuoso interior
Cada composición cuenta una historia diferente, primero esbozada a mano, luego traducida a formato digital y recreada en madera, capturando lugares, momentos y viajes que han dado forma a la leyenda del Phantom .
El tratamiento interior de las puertas es el más complejo y detallado en la historia de Rolls-Royce. Se necesitó un año entero para desarrollar estas piezas, llevando el material de la chapa a sus límites escultóricos. La obra de arte fusiona visualmente mapas geográficos, rutas sinuosas, paisajes imponentes, elementos florales y representaciones de modelos experimentales en una composición única e impactante.
La creación de las piezas de la puerta se logra elaborando individualmente secciones de la composición general y ensamblándolas como un intrincado mosaico. Realizado en madera de granadillo, seleccionada por su singular veteado, el diseño utiliza texturas, contrastes y reflectividad para realzar el material, creando un rico efecto visual con una paleta monocromática.
Se encargaron láminas de chapa de gran tamaño especialmente para este proyecto, adaptándose al generoso tamaño de las puertas de Phantom. Basándose en el veteado natural de la pieza, cada una de las grandes hojas de chapa se asigna a una sección específica de la composición. El diseñador responsable prestó especial atención a cómo el veteado capta la luz en diferentes ángulos, asegurando que nuevos detalles y texturas se revelen a cada mirada.
Para garantizar que nada desmerezca la composición general, las rejillas metálicas de los altavoces del Phantom se sustituyen por pequeñas aberturas fresadas directamente en la madera. El amplio panel se tiñe posteriormente para garantizar una uniformidad de color absoluta.