
Toyota Gazoo Racing decidió mostrar algo de lo que prepara para la próxima temporada del Campeonato Mundial de Resistencia, y lo hizo con un teaser que marca el inicio de una nueva etapa.
Tras un año difícil en el WEC, con un GR010 que dominó por años el circuito, pero que ya no alcanza para pelear contra rivales más jóvenes, la marca nipona advierte que para el próximo año tendrá un coche evolucionado y con la mira puesta en volver a la cima.
El material compartido por Toyota no muestra demasiado, pero sí lo suficiente para confirmar que estamos ante una renovación profunda del frontal. Ahí parece concentrarse el mayor trabajo aerodinámico, buscando reducir la resistencia al aire y ganar eficiencia. La nueva firma lumínica adelanta faros rediseñados y unos pasos de rueda que se integran de manera más fluida con el frente.
También se aprecia un habitáculo con líneas más estilizadas alrededor de la cúpula, detalle que apunta a un refinamiento general en el flujo de aire. En la parte trasera, en cambio, el rediseño parece más discreto, con la aleta de tiburón y los soportes del alerón que mantienen su esencia, aunque aparecen unas luces traseras nuevas que modernizan el trasero.
Superadas las 6 Horas de Fuji, Toyota sabe que su temporada 2025 en el WEC puede terminar sin podios, si en las 8 Horas de Bahréin no logran subir al cajón. Para un equipo que defendía el título de constructores, ese escenario sería un golpe duro.
Por eso, el adelanto del nuevo prototipo nos indica que Toyota no se va a quedar de brazos cruzados, y aprovechará los test posteriores a Bahréin para poner al nuevo auto en pista por primera vez.
Este no es un proyecto desde cero, pero sí una renovación necesaria que permita a Toyota volver a ser competitivo en una parrilla cada vez más apretada. Rivales como BMW, Alpine y Cadillac trabajan en evoluciones similares, lo que asegura que la temporada 2026 será aún más exigente.