La del domingo parecía una jornada fácil para el piloto de Toyota Ott Tänak, quien se había colocado como líder de la clasificación del Rally de Italia en la jornada sabatina, octava fecha del calendario 2019 del World Rally Championship (WRC), y se aprestaba a celebrar su tercera victoria consecutiva.
Tal como había acontenido en los rallies de Chile y Portugal, el estonio parecía imparable para todos, especialmente luego de que sus rivales más duros, el francés Sebastien Ogier (Citroën) y Thierry Neuveille (Hyundai) se habían descolgado de la lucha por problemas mecánicos.
De hecho, Tänak controló las especiales matinales del domingo sacando más ventaja a sus escoltas, medio minuto al español Dani Sordo (Hyundai) y un poco más al nórdico Teemu Suninen (Ford), hasta que llegó la Power Stage con la que cierra cada rally del año, y ahí todo cambió.
Sabiendo que este tramo especial regala puntos, y hasta su salida a la ruta Sebastien Ogier sumaba cuatro por el segundo mejor tiempo, Tänak aceleró más de lo normal y cometió un error impropio de su talento, realizando un trompo y dañando su dirección, dilapidando toda su ventaja y regalándole la victoria a Dani Sordo, su segunda en el WRC y tercer triunfo del año para Hyundai. Suninen quedó segundo y Mikelsen trepó al podio por segunda vez en la campaña.
Tänak salvó algo del dinero al acabar quinto, por delante de Neuville (6°) y de Ogier (11°), pasando de 25 unidades seguras a sólo 10, que no le impiden saltar al liderzgo del campeonato de pilotos. El de Toyota suma 150 puntos, cuatro más que Ogier (que sumó sus cuatro unidades del Power Stage) y siete más que Neuville.
En marcas, Hyundai saltó al primer lugar con 242 unidades, seguido de Toyota con 198 y de Citroën con 170, dejando cuarto a Ford con 152.
La próxima fecha se realizará desde el 4 de agosto en medio de los lagos de Finlandia.
