Al formar parte del parabrisas, las plumillas o limpiaparabrisas son un elemento clave del automóvil, ya que sin ellos sería imposible ver el camino en caso de lluvia o ante la caída de nieve o hielo. Si bien esta situación no es tan común en muchas regiones de Chile y el mundo, es importante tenerlas en cuenta en la mantención periódica del vehículo tal como se debe hacer con los neumáticos o el aceite del motor.
Bajo esta circunstancia, es sumamente importante que estos elemento estén en óptimas condiciones, por lo que hay que reemplazarlos periódicamente aun cuando el vehículo no sea usado, debido a que el plástico que lo conforma caduca.
Entonces...
¿Cada cuándo se cambian los limpiaparabrisas?
En promedio, tienen una vida media de entre 6 y 12 meses. Su durabilidad también varía sustancialmente si el vehículo pasa demasiadas horas estacionado bajo los rayos del sol.
Independientemente del tiempo de vida, es elemental realizar revisiones periódicamente para ver si el estado del plástico y de la goma es el ideal. En caso de que no trabajen correctamente, se deben cambiar de inmediato.
Cuando los limpiaparabrisas están muy gastados es muy fácil identificarlo, pues suelen tener la goma curvada, quebradiza o directamente rota. Además, suelen generar ruidos y vibraciones cuando se usan en mal estado.
Si no se está seguro de la condición de este elemento, lo mejor que se puede hacer es hacer la prueba. Para esto debes mojarlos con agua y activar el barrido sobre el parabrisas para comprobar su eficacia. Si el cristal no queda completamente nítido y necesita de varios barridos para completar su tarea, es síntoma de que están gastados.
Si después de intentar eso todavía no es evidente el estado de las plumillas, la recomendación es cambiarlas cada 12 meses para mantenerse siempre dentro de los márgenes considerados por los fabricantes.