Al igual que sucedió con el Corniche de 1939, Bentley ha decidido volver a producir uno de sus automóviles más icónicos: el "Blower" de 4½ litros de 1929.
En total, serán 12 unidades las que serán producidas a mano por Mulliner, el departamento de personalización de Bentley, para así traer de vuelta 90 años después uno de los automóviles más veloces de su época.
Desarrollado por Sir Tim Birkin, este icónico auto de carreras solo tuvo el registro de cuatro unidades para competir a fines de la década de 1920. Cada uno de ellos, peleó hasta el final en los circuitos europeos donde compitió, sin embargo, hubo un vehículo que sobresalió más, el auto #2 del equipo de Birkin. Este auto con el registro UU 5872, además de competir en Le Mans, obtuvo la victoria de Bentley Speed Six en 1930.
Si bien nunca ganó una carrera de resistencia, el Blower fue el auto de carreras más rápido de su época. Ningún otro Bentley de antes de la guerra tuvo un impacto como el sobrealimentado Bentley de 4½ litros. Como se mencionó, el auto nació gracias a Sir Tim Birkin, notable piloto de carreras y "Bentley Boy", para extraer más velocidad de los Bentleys de carreras del día.
No obstante que el método de Walter Owen Bentley era aumentar la capacidad del motor, Birkin quedó impresionado por el sobrealimentador tipo Roots desarrollado por el ingeniero británico Amherst Villiers, que aumentó la potencia del 4½ de 130 hp a 240 hp. Así, el piloto decidió desarrollar cuatro automóviles bajo esta fórmula en sus talleres de Birkin & Co.
Después de un formidable historial en las carreras, el auto #2 fue restaurado en la década de 1960, conservando gran parte de su pátina original. Propiedad de Bentley Motors desde 2000, solo ha tenido un mantenimiento cosmético menor, y es muy parecido a lo que Birkin lo habría manejado. Desde entonces, ha competido en cinco ocasiones en la moderna Mille Miglia, además de aparecer rodando en Le Mans, en Goodwood Festival of Speed y en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach.
Ahora, usando la artesanía de Bentley y la última tecnología digital, el Team Blower de 1929 será la matriz para recrear las 12 unidades subsecuentes, cada una para rendir homenaje al número de carreras en las que compitió la flota original.
Para lograr una reproducción auténtica al Blower original, el equipo de Bentley lo desmontará por completo, esto con el objetivo de catalogar y escanear meticulosamente en 3D todas las piezas. Lo anterior permitirá conseguir una réplica digital de todo el automóvil. Una vez obtenidos todos los elementos de forma virtual para su impresión, también se emplearán los moldes originales y las herramientas manuales tradicionales junto con la última tecnología de fabricación.
Todo este proceso permitirá que las 12 piezas sean idénticas al vehículo original, tanto en cuestiones mecánicas y estéticas, únicamente habrá ligeros cambios por motivos de las normas de seguridad actuales. Por su parte, el Blower original se volverá a montar, aprovechando la oportunidad para completar una inspección detallada y una restauración mecánica si es que es necesario.
Por último, Mulliner requerirá de aproximadamente dos años para completar la serie de 12 autos del Blower.