El Chevrolet Sail tiene tantos fanáticos como detractores, algunos de estos últimos muy virulentos respecto de su calidad y seguridad. Sin embargo, guste o no guste, es el auto más vendido en Chile, con más de 110 mil unidades entregadas en la última década.
El peso de la marca, un correcto diseño, un más que convincente andar y, especialmente, una gran relación precio/producto, han puesto a este sedán fabricado en China a la cabeza del mercado por años, enfrentándose con éxito a rivales de distintos orígenes y con propuestas distintas.
Sin embargo, hacia fines de 2019 se sumó al mercado chileno un rival que podría golpear fuertemente el posicionamiento del Sail y causarle algo de daño: el Kia Soluto.
Se trata de un modelo desarrollado y fabricado en China que utiliza como base la anterior generación del Rio 4, consiguiendo mantener los costos acotado con un diseño y calidad muy convincente. Y los resultados han sido buenísimos: casi mil autos vendidos en cuatro meses.
Hace algunas semanas publicamos nuestros respectivos test de cada uno de ambos sedanes, y si necesitas saber lo que pensamos del Chevrolet Sail puedes leer nuestro test aquí. Y si quieres saber qué gusto nos dejó el Kia Soluto, puedes hacer lo mismo en este otro link. En ambos casos podrás revisar los videotest publicados en nuestro canal en YouTube, y que te dejamos justo aquí abajo.
Pero lo que nos compete en esta nota es unas comparativa directa entre ambos sedanes, y para ordenarnos de mejor manera, los enfrenamos en cinco puntos que nosotros consideramos relevantes: diseño, mecánica, conectividad y seguridad (equipamiento), habitabilidad y, finalmente, manejo.
Tomamos la nueva versión Smart del Chevrolet Sail, la tope de gama que tiene un precio de lista de $8.390.000, aunque con los descuentos propios del financiamiento se coloca justo por debajo de los 8 millones. Y la enfrenamos a la versión más cara del Soluto denominada LX AC cuesta de lista $8.490.000, pero baja a $7.890.000 con los diferentes bonos disponibles.
Diseño: Soluto 1 – Sail 0
En este apartado nos encontramos con la disyuntiva si privilegiar la belleza o el contenido. Porque el Sail, en esta versión Smart que probamos, incluye llantas aro 15, neblineros delanteros y sunroof, equipamiento bastante inusual en este segmento de entrada.
Pero todo este contenido se ofrece en un paquete estético correcto, pero aburrido y con un look ya avejentado. Vale decir que el Sail data de 2010 y recibió una actualización de diseño en 2015, es decir, hace cinco años, y eso se nota.
Las líneas son simples, las formas son gruesas y la silueta es muy clásica, lo que es una ventaja frente a cierto tipo de clientes, pero una clara desventaja ante el público más joven.
Por el lado del Kia Soluto, nuestro editor adjunto, Jorge Beher, lo definió como un clásico moderno, con un look muy al estilo Kia, capaz de encantar a muchos sin llenar la carrocería de elementos suntuosos.
El frontal es muy similar al Rio 4 nuevo y al Morning, muestra líneas limpias y sólidas, y a diferencia de algunos nuevos modelos, no hay cortes a la vista. Los elementos de diseño del auto son más modernos, como los focos traseros pequeños, el portalón con un discreto spoiler y la patente puesta en parachoques. Y usa buenos materiales: cromados, plásticos negro brillante… Moderno para ser económico.
¿El problema? No tiene neblineros, usa tapas de rueda en neumáticos de 14 pulgadas y no tiene techo. Gustará más por su look, pero no tiene equipamiento exterior.
¿Qué prefieren? ¿Belleza estética o contenido? Diría que gana el Soluto.
Mecánica: Soluto 1 – Sail 1
Aquí también dependerá mucho de lo que el cliente ande buscando, porque por un lado tenemos más fuerza y empuje, pero a un costo mayor en combustible, y por el otro tenemos un motor más acotado de potencia, algo flojo en ciertas situaciones, pero mucho más rendidor.
Partamos por el el Chevrolet Sail, que se vende con un cuatro cilindros gasolinero de 1.5 litros, que genera con 102 caballos de fuerza y 143 Nm de par, y que está asociado a una caja manual de 5.
No es un motor nuevo en ningún caso, pero tiene dos cualidades importantes en este segmento: es altamente confiable, y tiene mucha potencia y torque, quizás el que más dentro de este subsegmento. Con esto podemos obtener una buena salida desde cero, una agradable aceleración lineal y caja bien regulada para todo tipo de usos.
Según el 3CV del Ministerio de Transportes, este auto rinde alrededor de 11,4 km/litro en ciudad y unos 17 en carretera, aunque la realidad es que nosotros no pudimos superar los 10 km/l en nuestra prueba bastante mixta.
El Kia Soluto, en tanto, también monta un bloque ultra probado en el grupo coreano: el 1.4 litros de 94 Hp y 132 Nm de par, asociado a caja manual de 5.
Si bien es algo flojo de salida, la configuración de caja con pasos de marcha cortos le ayuda bastante para un agradable manejo en ciudad, siendo muy eficiente es casi todas las situaciones de conducción.
Y el consumo formidable: 12,3 km/litro en ciudad y casi 20 en carretera. Y nosotros estuvimos bastante cerca de los 12, aunque en un uso más bien mixto.
Si bien el rendimiento es importante, la respuesta genera es mejor en el Sail.
Equipamiento: Soluto 2 – Sail 2
Considerando que ambos autos ofrecen casi el mismo equipamiento de confort (vidrios y espejos eléctricos, cierre centralizado, aire acondicionado, mandos en el volante), dividiremos este apartado en tres: construcción y calidad percibida, conectividad y seguridad.
Partamos con el Soluto, que brilla en los dos primeros apartados. Si bien los materiales utilizados en el interior están acordes al segmento y precio (no hay nada blando en el interior), se nota bien construido, con uniones bien realizadas y materiales que lucen muy bien.
Como suele ser en Kia, utiliza graficas modernas, materiales negro brillante, decoraciones cromadas, lo que lo hace lucir moderno y actual, quizás más caro de lo que cuesta.
No nos gusta la posición de los botones de las ventanas, que están escondidos en la parte baja de la consola, pero sí nos gusta que tenga un apoyabrazos central.
Lo mejor es la pantalla táctil del 7”, con conectividad inmediata a Apple CarPlay y Android Auto, con botones de acceso externo que la hacen muy sencilla de operar. Y funciona espectacular.
El punto negro es la seguridad, ya que ofrece frenos de discos adelante con ABS, doble airbag frontal y anclajes isofix. No tiene control de estabilidad ni sensores de retroceso, pero sí cuenta con cámara de retroceso.
El Chevrolet Sail, en tanto, se ve muchísimo más viejo por dentro, tanto en diseño como en materiales. Si bien puede que la calidad constructiva sea parecida a la del Soluto, la percepción es de un auto más barato, más pobre, más viejo.
Esta versión Smart incluye una nueva pantalla táctil Android, posiblemente instalada localmente, que no ofrece ni Apple CarPlay ni Android Auto. Ahora, si se le comparte internet desde el teléfono, permite utilizar aplicaciones previamente descargadas, como Waze y Spotify. No es fácil de usar para nada, es poco amigable y hay algo de reflejo, pero al menos está y oculta un lunar histórico en el Sail.
En cuanto seguridad, sabemos todos que hay mucha crítica al Sail por los resultados tras accidentes ocurridos en la calle, pero nosotros sólo podemos consignar la propuesta de equipamiento, y en esto le gana al Soluto ya que ofrece 4 airbags, frenos de disco adelante con ABS, cámara y sensor de retroceso, y anclajes isofix.
Diría que es un empate, pero por supuesto dependerá qué es lo que anda buscando el usuario. ¿Quiere look y conectividad, o prefiere más seguridad?
Habitabilidad: Soluto 2 – Sail 3
Si bien el Kia Soluto tiene 70 mm adicionales entre los ejes respecto del Sail (2.570 vs 2.500), esto no se refleja necesariamente en su habitabilidad interior.
El Sail tiene un excelente espacio en las plazas traseras, tanto para las piernas como para la cabeza, con una buena inclinación de respaldo.
El asiento central es relativamente plano, incluye cinturón de tres puntas, y no hay túnel central, por lo que genera suficiente espacio para poner los pies. En general caben tres adultos, quizás algo apretados en el ancho, pero caben más que bien.
Un dato diferenciador: los cabezales traseros son independientes.
Si nos vamos al maletero, Chevrolet declara 375 litros de capacidad. El espacio tiene un piso bajo y plano y un cajón bastante regular en formas. Y por debajo de ese piso se esconde un neumático completo de repuesto.
En el Soluto, en tanto, hay un espacio similar al del Sail, pero con modificaciones que mejoran y empeoran la experiencia a bordo. El tapiz es más bonito, bicolor y con texturas, pero los cabezales son integrales.
El diseño de los asientos es más tipo butaca, generando un buen confort para los pasajeros que van por los costados, pero a contramano, la plaza del medio es más alta y el respaldo más duro. Diría que es un 2+1. Como no hay túnel, hay espacio para pies y piernas, pero menos que en el Sail.
La maleta es un plus: 475 litros de capacidad. Se ve grande, el piso está bajo y el cajón es regular. Pero a simple vista no se ve mucho más grande que el del Sail, y bajo el piso hay un neumático provisorio.
En el conjunto creemos que gana el Sail.
Manejo: Soluto 3 – Sail 3
La mayor diferencia está en la plataforma. Mientras la del Kia Soluto fue renovada ofreciendo cualidades propias de un auto moderno (como el aplomo, suavidad e insonorización), la del Sail es antigua y se siente como tal.
Del Kia Soluto nos gusta la relación motor/caja, ya que la falta de potencia se compensa con una transmisión corta, escalonada para que escale muy bien en todo tipo de suso. Así, no se siente flojo ni falto de potencia, incluso en subidas.
El Soluto es entretenido de manejar, es ágil en todos los lugares. Su dirección eléctrica ofrece un radio de giro de auto chico, y si bien es algo liviano de dirección, es preciso y no se siente artificial.
La suspensión es agradable, neutral. No golpea, rola poco en velocidad, y atrás se siente algo suelto porque es liviano. Pero es muy sólido su andar en ciudad, es de lo más aplomado que hay en el segmento. Se siente seguro y como si fuera un auto más nuevo y más caro. Y eso es bueno.
El Sail, en tanto, se maneja como un auto más antiguo. Es sólido y compacto, pero no muy refinado. Vibra bastante, se escucha todo en su interior, es áspero sobre malos pavimentos e incluso pega algún tirón en aceleraciones.
Lo mejor es que se siente potente y “ torquea” bien desde cero.
Lo menos agradables es la suspensión, ya que no sólo flota de cola, sino que es seca, golpea mucho0 en extensión, y tiene poco recorrido del amortiguador. Aún así es un buen auto de ciudad, con una dirección a la antigua que se siente directa y ágil.
¿Por qué el Kia Soluto?
Porque es más moderno en todo. Su diseño exterior se asemeja mucho a los nuevos modelos de Kia, juega con los colores y texturas y ofrece una impronta moderna en un segmento de entrada.
Porque es un auto para los Millenial, con pantalla táctil fácil de usar y una conectividad real a teléfonos de cualquier compañía.
Porque ofrece un manejo fresco y moderno gracias a una buena plataforma, con una relación motor/caja que compensa la falta de fuerza, y con un manejo sólido para cualquier uso en cualquier lugar.
¿Por qué el Chevrolet Sail?
Por su historia, 10 años en el mercado y ventas récords, lo que nos garantiza la disponibilidad de repuestos y una buena reventa.
Porque se trata de un auto familiar que ofrece una habitabilidad muy buena, un gran maletero y la garantía de un viaje correcto a cualquier parte.
Porque tiene más contenido. Sunroof, llantas y neblinero por fuera, un motor más potente, más airbags, sensores… “Value”, como dicen en Estados Unidos.
Si quieres saber más, mira nuestro video comparativo y déjanos tu opinión.
Comparativa Chevrolet Sail vs Kia Soluto
Test drive Chevrolet Sail 2020
Test drive Kia Soluto 2020