Volkswagen Group Components es una división independiente que pertenece al Grupo Volkswagen, que se especializa en desarrollar y fabricar componentes estratégicos para la producción de los modelos de todas las marcas del conglomerado alemán. Cuenta con 60 plantas en todo el mundo divididas en cinco áreas de negocios, siendo una de ellas la de componentes para vehículos eléctricos.
Y es en esta área donde se acaba de reabrir una nueva planta. Se trata de la fábrica de Tianjin, que desde 2012 se especializaba en producir transmisiones, y que desde ahora se enfocará en producir los componentes con que se armarán todos los autos eléctricos que Volkswagen y sus marcas produzcan y vendan en China.
En Tianjin se producirán el motor APP 310 y la plataforma MEB, componentes cruciales para la fabricación de las versiones derivadas del nuevo ID.4: los ID.4 CROZZ y ID.4 X, ambos listos para salir a producción en China, el mayor mercado de autos eléctricos en el mundo. Pero también abastecerán de partes para los futuros modelos eléctricos que se lancen en el país.
El motor APP 310 es la nueva entrega de motores eléctricos del grupo, un motor síncrono de imanes permanentes que incorpora la transmisión en la misma estructura, y que entrega 150 kW de potencia (204 Hp) y 310 Nm de torque. Se acopla perfectamente a la batería dentro de la estructura de la plataforma especializada MEB.
Con esta apertura se libera la carga que hasta hoy recaía en exclusiva en la planta alemana de Kassel, donde se producen las partes de los autos eléctricos que se venden en Europa y Norteamérica. Entre ambas plantas se espera fabricar 880.000 motores eléctricos al año, elevando la capacidad a 1,4 millones de unidades para 2023.