La escudería británica Veloqx confirmó su regreso a la competición, después de dos décadas en que estuvo ausente, y lo hará en la categoría mayor del Campeonato Mundial de Resistencia (WEC), algo que se concretaría recién en 2024 o 2025, cuando tengan listo un totalmente nuevo hypercar al que bautizará como Fangio, en honor al cinco veces campeón de la Fórmula 1.
Sam Li, propietario de la estructura británica, aseguró que tiene los derechos para usar el nombre del Quíntuple “en ámbitos del automovilismo y la automoción”. Y agregó: “Su nombre simboliza lo mejor… Imagino que el Sr. Fangio estaría orgulloso de nuestro proyecto”.
El Audi Sport UK Team Veloqx.
Veloqx ganó el Campeonato Británico de GT en 2002, y en 2003 se impuso en la clase GTS en las 24 Horas de Le Mans con Prodrive como socio. Por esos años también compitió de manera exitosa en la Le Mans Endurance Series bajo el nombre Audi Sport UK Team Veloqx.
Li decidió dejar de competir hace 20 años para concentrarse en su negocio inmobiliario, pero ahora considera que tiene todo para luchar por el triunfo en el WEC. “He trabajado con un fabricante y he tenido éxito, pero quería hacer crecer la empresa hasta el punto de poder tener más valor añadido técnicamente cuando volviera. Ahora estoy comprometido a intentar ganar Le Mans bajo el nombre de Veloqx”, explicó el empresario a Autosport.
Además de bautizar a su hypercar como Fangio, el vehículo estará impulsado con un motor capaz de utilizar biocombustible, incluido el hidrógeno verde. El impulsor estará a cargo de Ulrich Baretzky, antiguo jefe de motores de Audi en la época que tuvo a la marca alemana como dominadora de las carreras de resistencia.
Fangio en su Mercedes en la trágica carrera de 1955.
Vale decir que la relación de Juan Manuel Fangio con las 24 Horas de Le Mans no fue de las mejores. El piloto argentino participó en cuatro oportunidades (1950, 1951, 1953 y 1955) pero nunca pudo acabar la carrera. Condujo un Simca Gordini T15S, un Talbot Lago T26C-GS, un Alfa Romeo 6C 3000 CM y un Mercedes Benz 300 SLR.
Fue en esta última participación cuando haciendo equipo con Stirling Moss, se produjo el peor accidente que recuerde la carrera francesa, cuando murieron 82 espectadores además del piloto francés Pierre Levegh, quien perdió el control de su Mercedes y fue catapultado hacia las graderías. Mercedes, en señal de duelo, retiró todos sus autos cuando Fangio lideraba cómodamente la carrera.