Ciertas plantas operadas por Volkswagen y Renault suspenderán sus operaciones en ciertos días de marzo de 2022 debido a rompimiento de la cadena de producción derivada de la guerra entre Ucrania y Rusia.
Concretamente, los cuellos de botella harán que Volkswagen detenga la producción en sus plantas de Zwickau y Dresden, ambas en Alemania, por unos días desde principios de marzo debido a la escasez de piezas elaboradas en Ucrania, incluidos los juegos de cables eléctricos.
Por su parte, Renault detendrá las operaciones en su planta de Moscú, ya que los cuellos de botella en la frontera rusa retrasan las entregas de piezas. Otra de sus plantas, operada por la empresa AvtoVaz en Toliatti (Rusia), detendrá la producción por un día ante la escasez de semiconductores.
Renault produce modelos como el Captur y Duster en la planta de Moscú, y fabrica modelos Lada a través de su empresa AvtoVaz. Rusia es el segundo mercado de Renault, con casi un 20% de las ventas en volumen.
En total, los fabricantes alemanes de automóviles y sus proveedores mantienen unos 49 centros de producción en Rusia y Ucrania, y las consecuencias para las empresas y sus empleados aún no están del todo claras.