Vende tu auto
Test drive

Test drive Volkswagen Tiguan: 4 razones para comprarlo y 2 para no hacerlo

La actualización de mitad de vida del modelo suma equipamiento y seguridad, pero está muchísimo más caro.

Test drive Volkswagen Tiguan: 4 razones para comprarlo y 2 para no hacerlo

El Volkswagen Tiguan es el modelo más importante de Volkswagen en el mundo, no por historia sino por ventas.

Desde que se lanzó en 2007, la marca ha comercializado 7 millones de unidades, pero de ellas, el 65% corresponden a la segunda generación lanzada en 2016, y que arribó a Chile en 2017. Como ya le tocaba una actualización, Volkwagen la presentó a mediados de 2021 y lo trajo a Chile en el primer semestre de este año.

Y la norma indica que si algo funciona, no hay que cambiarlo, por lo que la marca le dio un ligero retoque estético, especialmente en el frontal, le añadió tecnología y equipamiento, y sumó elementos de seguridad activa.

El Volkswagen Tiguan se ofrece hoy en el país en tres versiones, Comfortline ($30.690.000), Highline ($35.090.000) y R-Line 4Motion ($41.490.000), todos precios a noviembre de 2022. Si quieres conocer los cambios en detalle, así como la gama del Tiguan en Chile, puedes leer nuestra nota de lanzamiento aquí o entrar a nuestro catálogo.

En esta prueba te entregaremos 4 razones por las que vale la pena comprar un Volkwagen Tiguan y tres por la que no.

1.- Por qué comprarlo: producto consolidado

Volkswagen ha vendido más de 7 millones de unidades de este modelo en todo el mundo, y casi 9.000 de ellas sólo en Chile. Es un producto consolidado, conocido, y con larga durabilidad.

Además es un Volkswagen, con todo lo que ello significa en acabados y terminaciones, confiabilidad de mediano y largo plazo, y calidad conductiva. Es un SUV que se siente sólido, bien construido, y que difícilmente dará problemas vinculados a malos ajustes, vibraciones y fallas.

Además, ahora estrena un nuevo diseño frontal, más maduro y alineado con los nuevos modelos de la gama, pero sin romper del todo con su antecesor. Y eso, a la larga, permite a los usuarios no perder gran valor de reventa.

Sigue siendo un modelo cómodo, fácil de usar, con un buen paquete de equipamiento ya de serie, y mucha tecnología de conectividad.

2.- Por qué comprarlo: buen motor

Volkswagen simplifica su oferta mecánica para este modelo y ofrecerá sólo dos opciones.Las dos primeras, Comfortline y Highline, se mueven con un muy correcto gasolinero TSI de 1.4 litros, que eroga 150 Hp de potencia y 250 Nm desde las 1.500 rpm, acoplado a una caja automática DSG de 6 cambios y tracción delantera. 

Este motor equipado en nuestro unidad de pruebas puede que en los números se sienta pequeño, pero es el motor adecuado para un uso cotidiano, y en un 95% del tiempo estará más que sobrado. Quizás en una trepada, con mucha carga o todos los asientos ocupados, puede que comience a flaquear, pero así surge esta estupenda caja en su rescate.

Hay un mínimo turbolag de salida, pero la caja lo mueve rápido sobre las 1.500 rpm, que es donde está su peak de torque. Y la respuesta entonces es contundente, dependiendo del peso que le apliquemos al pedal.

Y además es bastante económico, con un consumo homologado de 9 km/litro en ciudad y casi 12 en ciclo mixto. 

Volkswagen ofrece también un segundo motor TSI de dos litros, con 220 Hp y 350 Nm de par, acoplado a una caja DSG de 7 cambios y a un sistema de tracción total 4Motion. 

3.- Por qué comprarlo: un andar excepcional

Lo mejor del Volkswagen Tiguan es su plataforma, la MQB, que es excelente, y le permite ofrecer una conducción sobresaliente, con un comportamiento muy dinámico y confortable a la vez, lo que de por sí es una muestra de gran calidad.

La plataforma ofrece una suspensión de tacto firme pero muy agradable sobre malos pavimentos, minimizando los cabeceos y balanceos de la carrocería. Además cuenta con una dirección rápida, responsiva y transmisiva, que permite que el conductor se sienta seguro ante la respuesta a sus movimientos del volante. 

Y además, cuenta con una rigidez general que denota un auto de alta calidad, de un segmento superior, muy seguro de conducir, agradable en ciudad y en viajes largo, con un habitáculo impecablemente aislado, tanto del ruido (motor, rodadura, viento) como de las vibraciones. 

Diría que es uno de los referentes en el segmento en lo que conducción de calidad se refiere. 

4.- Por qué comprarlo: más elementos seguridad

Uno de los puntos altos del Volkswagen Tiguan es que a su ya excelente propuesta de seguridad, ofrece ahora de serie nuevas asistencias a la seguridad englobados en el sistema IQ.Drive.

 Entre ellas podemos contar con alerta de colisión frontal con frenado de emergencia y detección de peatones, y control de crucero adaptativo (ACC) con Stop & Go. 

El Tiguan viene, además, con luces Full LED con DRL y neblineros (los Faros IQ.Lights adaptativos están disponibles desde la versión Highline), airbags frontales, laterales y de cortina, controles de tracción y estabilidad, detector de cansancio del conductor, sensores delanteros y traseros con cámara de retroceso, asistente de partida en pendiente, cinturones de tres puntas y anclajes isofix, entre otros.

Un último punto muy relevante considerando los inciertos días que vivimos es el nuevo Volkswagen Control, un sistema de GPS incorporado con corta corriente desde una App, que permite apagar el motor a distancia en caso de robo del vehículo. Eso sí, tiene un costo mensual de activación.

Vale recordar que el Tiguan es garantía de seguridad al haber obtenido la máxima puntuación en test de choque en Europa y Estados Unidos.

1.- Por qué NO comprarlo: espacio interior

En este nueva evolución, Volkswagen decidió dejar al Tiguan exclusivamente como un modelo de 7 plazas, pero se olvida que sólo mide 4.728 mm de largo y tiene 2.790 mm entre los ejes, que son medidas más propias de un cinco plazas.

Y eso se nota en la tercera corrida de asientos, que es diminuta. Es cierto, con flexibilidad y un poco de buena voluntad todos podemos caber adentro, pero cuando uno paga más de 30 millones de pesos quiere que las cosas funcionen a la primera.

Partamos por la segunda fila, que es excelente. Cuenta con una puerta de ingreso grande, mucho espacio para la cabeza y las piernas, y la opción de desplazar el asiento longitudinalmente. La posición ahí es cómoda, los respaldo se pueden reclinar y no hay sensación de encierro. Además, la plaza central no es del todo mala. El túnel central es grande y obliga a abrir la piernas y el erspaldo es duro, pero se puede ir ahí.

Vamos a la tercera fila, donde un adulto bajo como yo no cabe, incluso si las plazas delanteras van corridas hacia adelante. La cabeza topando el techo, las piernas van aplastadas contra el respaldo (si es que pueden cerrarllo) y la sensación de encierro es alta. Niños pequeños caben, pero el problema es que los niños pequeños deben ir en sillas o alzadores.

Si bien el espacio interior es bueno para cinco ocupantes, está lejos de ser el mejor 7 plazas del segmento.

2.- Por qué NO comprarlo: precio

Este modelo sube y sube, como todos los que se venden enm Chile, pero aquí se nota más. Cuando se lanzó la segunda generación del Tiguan hace cinco años costaba la mitad que cuando se puso en venta su actualización en mayo pasado, y desde entonces ha vuelto a subir mucho.

En este rango de precios entre 30 y 40 millones se consiguen modelos de 5 plazas más equipados, y de siete más grandes. Si bien no es una razón definitiva para no comprarlo (hay muchos puntos sobresalientes que compensan este ítem), la relación precio/producto no es la más adecuada.

Test drive Volkswagen Tiguan 2023

Marcelo Palomino recomienda