Sin lugar a dudas, estoy convencido de que la mejor manera de disfrutar de nuestro automóvil es entendiendo su funcionalidad y todas sus capacidades, sobre todo cuando se trata de un auto de altas prestaciones. La marca alemana Audi diseñó para ello una escuela de manejo enfocada en sus clientes, para entender y mejorar la conducción deportiva de sus autos. Y no, no es una clínica de conducción cualquiera, esto va mucho más allá y aquí te lo contamos todo.
En Finlandia, a 200 kilómetros del Círculo Polar Ártico, se encuentra la región de Laponia, un lugar en donde los días más fríos pueden alcanzar temperaturas de hasta 27 grados bajo cero. Gracias a estas temperaturas, sus lagos se congelan por completo, lo que es aprovechado por el equipo de Audi AG para convertir algunos de estos lagos en pistas de hielo, y ofrecer a sus clientes esta clínica de conducción llamada Audi Ice Experience.
En Autocosmos tuvimos oportunidad de poder vivir esta experiencia, así que emprendimos el largo viaje hasta llegar hasta a Laponia y poder disfrutar de cuatro días de manejo en diferentes pistas congeladas, a bordo del Audi RS4 Avant y sus 450 caballos de fuerza, el cual cuenta con una transmisión automática de ocho velocidades y la ya famosa tracción quattro de la casa alemana. Y es aquí donde todo toma sentido y se pone interesante la cosa.
Es en estos circuitos congelados donde ocurre la magia. Supervisados por Marcus Fiechtl, nuestro “Big Brother”, quien con más de 30 años de experiencia impartiendo cursos de manejo sobre hielo, se encarga de que nuestro desempeño en la pista este lleno emociones.
Con estos paisajes espectaculares en donde todo se pinta de blanco comienza la diversión, recorridos que van desde manejar en un “simple” óvalo, hasta trazados más técnicos, rápidos y que cada vez se vuelven más exigentes, el reto en cada vuelta es aprender de cada derrapada, tratar de no cometer errores, y que cada trazo en las curvas quede perfecto.
Para lograr esto, necesitamos neumáticos de invierno adaptados con 220 clavos cada uno para tener una mejor tracción. La primera regla antes de entrar al circuito es desconectar el control de estabilidad, y a partir de aquí comienza el juego, controlar las inercias, entender la transferencia de peso del auto y saber en que momento acelerar, frenar, y la delicadeza de como girar el volante. Para ser honestos, es muy fácil cometer errores que nos llevan fuera de la pista y esperar a que un tractor nos rescate de la nieve.
Algo que agradecemos es que Markus nos da oportunidad de ser nosotros mismos dentro de la pista. Si es necesario corregir algún detalle, a través de un radio lo realiza, y a seguir practicando, acelerar, llevar el volante con suavidad, la vista al punto donde queremos poner nuestro RS4, y frenar. En esta escuela es muy importante el frenado.
Como en todos lo colegios, al final del curso hay un “examen”:, una vuelta cronometrada dentro del circuito más largo, y por obvias razones, aquí la emoción va a tope, comprobando que lo espectacular no siempre es lo que da los mejores resultados. La cereza del pastel, poder dar un par de hot laps con el Audi e-tron GT RS en el óvalo congelado.
Esta experiencia incluye el curso de conducción para una persona, viaje en avión desde Madrid o Barcelona hasta Kittilä, Finlandia, 3 noches en el Hotel Lapland Olos, alimentos y todos los traslados en Finlandia. Además, podrás disfrutar de un tour en moto de nieve por los lagos helados. La experiencia tiene una duración completa de 4 días y tiene un costo de 4.600 euros, unos 4,7 millones de pesos.
Si te gustan los autos, el frío y crees en Santa Claus, esta es una experiencia que no te puedes perder.