En los últimos meses, la relación entre las autoridades italianas y Stellantis ha ido empeorando. Recordemos el caso del Alfa Romeo Milano, que debió cambiar repentinamente de nombre a Junior, ya que no se produciría en el país itálico sino en Polonia, algo que contraviene una ley italiana.
Siguiendo esta línea y valiéndose de la ley “Made in Italy”, la cual busca evitar que se hagan pasar productos extranjeros como italianos, el gobierno impidió el uso de la bandera en los Fiat Topolino y 600 por estar fabricados en Marruecos y Polonia, respectivamente.
Y recientemente, el periódico Il Sole 24 Ore publicó que el Ejecutivo liderado por Giorgia Meloni estaría planeando expropiar dos históricas marcas en desuso que pertenecen a Stellantis, para ofrecérselas a un fabricante chino.
Las marcas italianas en cuestión son Autobianchi e Innocenti, las cuales han permanecido sin utilizarse desde 1995 y 1997, respectivamente y sabemos que el ministerio de Empresa ha solicitado su registro en la oficina de patentes, siendo el primer paso para llevar a cabo la expropiación.
Al parecer, ambas serían ofrecidas a un fabricante chino siempre y cuando la producción se realice en Italia. Entre los posibles candidatos encontramos a BYD, Chirey, Dongfeng, Great Wall y JAC.
Recordemos que la ley Made in Italy permite al Estado tomar posesión de marcas italianas históricas que hayan permanecido en desuso durante al menos cinco años, por lo que ambas marcas cumplen los requisitos.
