
Felix Page, editor de Autocar, conversó con Jonathan Wells, jefe de diseño en Morgan, quien deslizó un muy buen concepto para ejemplificar la filosofía más concreta que hay tras los autos de esta marca: "Existe esta idea de 'potencia silenciosa' en un Morgan, en el sentido de que no quieres una experiencia convolucionada o confusa. Esto es escapismo."
El escapismo, parece ser un sinónimo más hedonista para el concepto de "desintoxicación" que hoy emplean muchas marcas de auto. Morgan es una marca que existe puramente para ofrecer esa experiencia que hoy no se encuentra en tiempos de autos híbridos, con más de 1.000 caballos de potencia y diseños intrincados. Tú te compras un Morgan porque quieres volver a sentarte en un auto liviano, potente y que con su diseño, te lleve a tiempos más simples pero no menos entretenidos. Por supuesto que Morgan no puede ser una marca ajena al paso del tiempo, pero con el nuevo Supersport, sucesor del Plus Six, pretenden acercarse a esta idea moderna de escapismo, un auto que te compras para rebelarte ante el paso del tiempo, sea para huir de los estériles tiempos actuales o por el contrario, para detener el tiempo de curva a curva. Aun siendo un auto fabricado con un tren motriz BMW de última generación (igual que el Plus Six), el nuevo Morgan Supersport podría ser esa máquina del tiempo que Porsche o Aston Martin han dejado de ser.
Y eso es porque el Supersport quiere ser una alternativa más usable de lo que fue el Plus Six. O sea que puedas pensarlo como una alternativa más purista a un 911 base. Para lograr aquello, sin traicionar la filosofía de la marca, hay que saber dónde ser más flexible y en Morgan han sido inteligentes, porque conciliaron en todos los puntos donde el Supersport es un mejor auto.
Por ejemplo, la suspensión del Supersport tiene 80 mm de recorrido, versus los 50 mm del Plus Six, algo que va de la mano con nuevos neumáticos Michelin Pilot Sport 5, los cuales se escogieron más por su sensación y tacto, que por su agarre y calidad. Y esto es para lograr un manejo más agradable y un rólido más controlado. La rigidez se ha trasladado a las barras de torsión, a las llantas forjadas de 18 o 19 pulgadas y a la nueva plataforma CXV, que técnicamente es una evolución de la plataforma anterior, pero con más rigidez torsional (10% más, 20% si le sumamos el techo rígido removible). Ahora, como la estructura se revisó en puntos claves, esos 10% o 20%, se sienten como un cambio al 100% en algunas áreas, según indica la marca. Incluso el rack de dirección se simplificó, para tener una conexión más directa. Como opcionales, puedes colocar suspensión con amortiguación adaptable y un diferencial LSD trasero, pero como puedes darte cuenta, no hay una ensalada de sensores o asistencias.
Impulsando al Supersport encontramos un seis-en-línea de BMW, el B58 de 340 Hp y 500 Nm de torque, asociado a una caja automática de 8 velocidades. Incluso el selector de la transmisión es de BMW, lo que parece la única pieza disonante en este auto. Hay que aceptarlo, considerando que gracias a este motor, el Supersport hace el 0 a 100 en menos de 4 segundos.
Usar un Morgan como un auto moderno no traiciona la filosofía escapista de la marca. Que el Supersport tenga un maletero (usable) con apertura remota o un sistema de audio Sennheiser, así como una mejor insonorización, no tienen relevancia en el manejo de este auto, por ende, son detalles bienvenidos. Aun puedes sacar el techo por tu cuenta o sacar las ventanas. Con suerte tienes una pantalla digital frene al volante, acompañada de muchos relojes clásicos y un par de botones. Mira los espejos, las viseras o el diseño de los asientos y sabrás que Morgan supo que tocar y que no.
Del diseño, podemos decir que se trata de un ejercicio retrofuturista que conserva todos los rasgos elegantes de un buen Morgan. Su silueta es anacrónica, pero llena de detalles más modernos, como los focos LED más integrados, las llantas selladas, el agresivo frontal y las líneas de corte simplificadas; un auto clásico, pero depurado en el 2025. Y ojo, que sigue siendo fabricado artesanalmente en aluminio.
Morgan ofrecerá al Supersport aproximadamente desde los 110 mil dólares. Ojalá lo veamos en Chile.