Pocas veces ponemos atención al tipo de humo que está saliendo de nuestro vehículo ya que sólo nos preocupa que encienda sin problema y después arrancar para ir a nuestro destino. Sin embargo, un chequeo de vez en cuando al humo que sale del escape nos permitirá saber en qué condiciones se encuentra nuestro motor, o en su caso, si has sentido que se comporta raro podrás darte una idea de qué problema tiene.
A continuación te indicamos los tipos de humo que existen -según color- y qué es lo que lo provoca..
Humo Negro
En el caso de un motor de carburador indica que la mezcla de aire y gasolina está mal compensada, lo que se refleja en un alto consumo de combustible. En el caso de motores de inyección pueden ser muchas las razones. Una de ellas puede indicar que la computadora está mal y los sensores no sirven (como el de oxígeno, entre otros); lo otro es que el regulador de combustible principal de inyección no esté trabajando. Cualquiera que sea la causa es definitivamente un problema relacionado con el exceso de combustible.
Humo blanco
En un día frío con temperaturas muy bajas lo que parecer ser humo blanco saliendo del tubo de escape desaparecerá unos minutos después de que el motor se haya calentado. Lo que podría parecer humo es realmente vapor de agua que se genera por la condensación de lo caliente del escape con restos de agua que se acumularon en el tubo de escape o en el convertidor catalítico. Por otro lado, otra causa de que salga humo blanco es porque el vehículo está quemando o derritiendo anticongelante/refrigerante dentro de la cámara de combustión.
Humo gris
A diferencia de que el humo negro es causado por el exceso de combustible, el humo gris es causado principalmente por la falta de combustible. Esto quiere decir que la mezcla de aire y combustible no está equilibrada, el motor necesita más inyección de combustible y tiene un exceso de aire.
Humo azul
Quizá de todos los tipos de humo el más crítico es el humo azul ya que es una indicación que el motor está quemando aceite. Las causas principales de que el aceite esté pasando a la cámara de combustión son que los anillos de los pistones están débiles-desgastados, las guías o los sellos de las válvulas están mal. Un motor que quema mucho aceite (más de un litro en 800 kms) está deteriorado y necesita una reparación a fondo. Ahora si lo comparamos con un propulsor en buenas condiciones éste tendría un consumo de aceite de un litro cada 2400 kms, mientras que en motores más nuevos el consumo es de ½ litro cada 4800kms.
Si notas que tu vehículo tiene cualquiera de los tipos de humo que te comentamos, tu motor requiere una revisión exhaustiva por parte de tu mecánico. Recuerda que mantener tu auto en buenas condiciones asegura su buen funcionamiento y prolongas la vida del mismo.